Las denuncias por ciberdelincuencia en Baleares se han multiplicado por cuatro en cinco años, pasando de 2.892 en 2016 a 11.800 en 2020, mientras que a nivel estatal se han multiplicado por tres en este periodo de tiempo -de 92.716 a 287.963-. Además, en 2021, las infracción más habitual relacionada con la cibercriminalidad en el archipiélago fueron los fraudes informáticos (84,4 por ciento), seguida de amenazas y coacciones (7,6 por ciento), falsificación informática (3,6 por ciento) e interferencias en los datos (0,8 por ciento).
En declaraciones a los medios, el conseller de Fons Europeus, Universitat i Cultura, Miquel Company, ha explicado en este sentido que el archipiélago ha lanzado la Estrategia de Ciberseguridad de Baleares, que entre otros objetivos busca garantizar la ciberseguridad en la Administración, consells insulars, ayuntamientos y empresas e instituciones.
Para ello, se llevará a cabo la creación de una Unidad de Innovación Tecnológica en Ciberseguridad (Unitcib) con la Universitat de les Illes Balears (UIB), se firmará un convenio de colaboración con el Centro Criptológico Nacional, se impulsará un Centro de Ciberseguridad de Baleares como órgano interno de la Comunidad y se desarrollará el proyecto 'Retech Ciberreg'.
Por otro lado, la Estrategia conllevará la contratación de un Centro de Operaciones de Ciberseguridad, encargado de realizar las tareas de detección y gestión de ciberamenazas, y de aplicar las políticas de ciberseguridad y cumplimiento del Esquema de Ciberseguridad (ENS).