Epidemiologia de Baleares registró en 2021 un total de 452 casos de gonorrea y 212 de sífilis, más del doble que hace un lustro; por su parte, la sección de diagnóstico molecular del laboratorio de Son Espases notificó 970 casos de clamidia. Las enfermedades de transmisión sexual están viviendo «un aumento espectacular» en la última década, las curvas de transmisión «son como un tobogán para arriba. La alarma es generalizada». Son palabras de la doctora Julia Serra, coordinadora del Centro CAITS de Diagnóstico, tratamiento y prevención de infecciones de transmisión sexual de la comunidad.
«Cada día diagnosticamos casos y tenemos la sensación de que este año va a más. Vimos ocho gonorreas en una tarde, esto no había pasado antes», añade.
El cambio de conducta, el uso de aplicaciones de contactos o una protección insuficiente en las relaciones sexuales son sólo algunos de los motivos. Por el lado positivo está el hecho de que hay una mayor conciencia y la gente se hace más pruebas. «Tenemos la sensación de que quien lo prueba, repite». Las enfermedades más importantes y extendidas son la clamidia, la gonorrea y la sífilis. «Las dos primeras dan uretritis; es la principal clínica en los hombres a quien les sale pus en la orina», sin embargo el problema es que «muchas veces las infecciones son asintomáticas, como los portadores de COVID», indica Serra.
La gonorrea y la sífilis es más común en hombres que en mujeres, no así la clamidia, «una bacteria que en ellas produce la inflamación del cérvix». En cualquier caso, lo peligroso, señala la experta, «es que al no detectarla, igual que la gonorrea, puede producir infertilidad». Así pues ¿cómo prevenir los contagios? Por un lado descubriendo los falsos mitos entorno a ellos, por otro con educación y finalmente «con estrategias combinadas porque no es sólo que hay que usar el preservativo, sino también hay que llevar una vida saludable», explica la doctora Serra quien pide «más campañas informativas, un mejor acceso a las pruebas y que los preservativos sean gratis»