La inflación se moderó en Baleares al 3,4 % interanual en marzo, 2,6 puntos por debajo de la tasa de febrero, por el descenso de los precios de la electricidad y los carburantes frente a las fuertes subidas registradas en marzo de 2022 tras el inicio de la guerra de Ucrania. Según el dato confirmado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el índice de precios de consumo (IPC) marcó así en marzo la tasa más baja desde agosto de 2021, mientras que la subyacente -sin contar con productos energéticos ni alimentos no elaborados- solo disminuyó una décima, hasta el 7,5 %.
Respecto a febrero, los precios han subido en Baleares un 0,2% y se han incrementado en lo que va de año un 1,3%. En el archipiélago, según los datos del INE los precios de los alimentos crecieron en marzo un 16,2% en tasa interanual y un 0,9% respecto a febrero. Por su parte, la vivienda, el agua, la electricidad el gas y otros combustibles bajó el tercero mes del año un 16,8% respecto a 2022 y 1,9% respecto a febrero. Baja también el transporte, un 3,2% respecto al año pasado. Por el contrario, en relación a 2022 suben las bebidas alcohólicas y el tabaco (10,3%), el vestido y el calzado (5,9%), los muebles y los artículos para el hogar (7,3%), la sanidad (4,5%), las comunicaciones (2,6%), el ocio y la cultura (4%), la enseñanza (3,6%), los restaurantes y los hoteles (8,9%) y otros bienes y servicios (6%).
En el conjunto de España, el INE ha confirmado que ese 3,3 % del índice general del IPC supone la tasa más baja desde agosto de 2021; mientras que la subyacente -sin contar con productos energéticos ni alimentos no elaborados- solo disminuyó una décima, hasta el 7,5 %. Esta diferencia de 4,2 puntos entre las tasas de inflación general y subyacente es la más alta desde agosto de 1986, cuando el INE empezó a calcular la subyacente, y ese descenso de 2,7 puntos en la tasa de inflación general es el mayor en un mes desde mayo de 1977.
La inflación comenzó a escalar en el verano de 2021 por el aumento de la demanda global de la energía tras la pandemia y tocó techo un año después, en julio de 2022, al alcanzar el 10,8 %. Esta evolución alcista provocada por el aumento de los precios energéticos se ha ido trasladando al resto de componentes, especialmente al grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas que el pasado febrero registraron una subida interanual récord del 16,6 %, a pesar de la rebaja o eliminación del IVA a algunos productos básicos.
En marzo, esta tasa se ha moderado una décima, a ese 16,5 %, con subidas que llegan al 50,4 % en el caso del azúcar, el 37,7 % para la mantequilla, el 32,1 % para el aceite de oliva o del 30,8 % para la leche entera. También siguen al alza las legumbres y hortalizas, un 27,8 %; las harinas, un 24,9 %, o los huevos, un 24,5 %. En cuanto a la tasa mensual, en marzo fue del 0,4 % por las subidas en alimentación y en vestido y calzado, así como en hoteles, cafés y restaurantes. Por otro lado, el índice de precios de consumo armonizado (IPCA) situó su tasa anual en el 3,1 %, casi tres puntos inferior a la del mes anterior.
El Ministerio de Asuntos Económicos ha destacado que la inflación de marzo es casi tres veces inferior a la registrada un año antes y que España se mantiene entre los países con la inflación más baja de la Unión Europea. "Esta menor inflación está favoreciendo la competitividad de las empresas españolas, como ponen de manifiesto las ganancias de cuota de mercado y el aumento de las exportaciones de bienes y servicios, incluso en el complejo contexto económico internacional", añaden. Por comunidades, la tasa anual del IPC disminuyó en marzo respecto a febrero en todas con los mayores descensos en Castilla-La Mancha, Aragón y Castilla y León, con bajadas de 3,5, 3,2 y 3,1 puntos, respectivamente.