Grupo Fergus y Grupo Matutes invertirán 20 millones de euros en cambiar la cara de una parte de la oferta hotelera de Magaluf. Se trata concretamente del proyecto de reposicionamiento BH Mallorca Resort de Magaluf, que remozará el complejo hotelero de la marca con la que Grupo Cursach entró en el negocio hotelero hace unos años. La idea es reconvertir las instalaciones de BH Hotel, BCM Hotel y BH Apartments en tres nuevos hoteles independientes con una oferta orientada a un turismo familiar de mayor calidad y poder adquisitivo, alejado del típico perfil de playa y cubata que se pretende ir desterrando poco a poco de la zona. Es decir, seguir subiendo el caché del núcleo calvianer para hacerlo cada vez menos apto para el turismo low cost.
Son en total 1.056 habitaciones que se dividirán en el Fergus Club Mallorca Waterpark (656 unidades), que será el hotel con un mayor parque acuático en Baleares; el Tent Calvià Beach (280 habitaciones) y el Tent Mojito Suites (120). El nuevo complejo contribuirá en el alargamiento de la temporada operando dos meses más al año de los que se opera actualmente y además rebajará el porcentaje de clientes de la zona integrados en la oferta de todo incluido, lo cual, han destacado, será positivo para toda la oferta complementaria.
Pep Cañellas, fundador y propietario de Grupo Fergus, ha destacado que su pretensión es que el proyecto pueda ser «el empujón definitivo que necesita la zona», en referencia al paulatino proceso de transformación de la oferta hotelera en pos de ese modelo de mayor calidad, algo en lo que «llevamos haciendo esfuerzos durante muchos años».
Aunque la gestión la llevará Fergus, se trata de una inversión conjunta con Grupo Matutes, una marca «legendaria» y «con una trayectoria que les avala», ha destacado Cañellas. José Luis Benítez, director de Relacions Institucionales de Palladium Hotel Group (de Grupo Matutes), ha destacado que han elegido a Fergus como gestor del proyecto por ser «el mejor partenaire posible y que conoce muy bien la zona».
Jaume Bauzà, conseller de Turisme, Cultura i Esports del Govern, señaló que «nosotros venimos a ayudar y queremos que el papel público esté a la altura». Asimismo, ha destacado que el proyecto «liga con todo lo que queremos en materia de política turística: mejorar la calidad de la oferta».
Por su parte, el conseller insular de Turisme, José Marcial Rodríguez, se ha expresado en términos similares al recalcar que «la iniciativa privada es la que va a mejorar los entornos y la que ha demostrado históricamente que la actividad turística es nuestro mayor activo». En ese sentido, el conseller ha ofrecido toda su colaboración, al tiempo que ha lamentado que la iniciativa pública «muchas veces no ha estado a la altura de muchos proyectos privados».
Por último, el alcalde de Calvià, Juan Antonio Amengual, destacó que el «cambio de concepto» que se está trabajando en la zona «nos va a permitir llegar a otro tipo de mercado justo cuando tenemos un punto crítico a 300 metros», en referencia precisamente a la calle de Punta Ballena, una de las mecas del turismo de excesos en Mallorca. Al hilo de este proceso de reconversión de la zona y del papel que deben jugar las instituciones públicas, el primer edil señaló que «lo que quieren los empresarios es que nosotros y las fuerzas del orden hagamos nuestro trabajo y mantengamos las calles limpias y seguras».