El cocinero de un restaurante de Alcúdia ha sido condenado por dar un rodillazo en los genitales a un camarero. La Audiencia de Palma ha confirmado la multa de 360 euros que impuso un juzgado de Instrucción de Inca al agresor y la indemnización de 8.200 para la víctima por las lesiones y secuelas.
Los hechos enjuiciados tuvieron lugar en un establecimiento de la Victòria, en Alcúdia, el día 15 de agosto de 2021. El acusado se encontraba trabajando en la cocina cuando, estando de espaldas, el camarero dejó caer un bolígrafo y al recogerlo se lo pasó por la entrepierna al cocinero.
El camarero, según la sentencia, sabía que este acto le molestaría debido a que habían tenido enfrentamientos con anterioridad. El perjudicado continuó con su trabajo y, al cabo de unos minutos, regresó a la cocina del restaurante y pasó por al lado del cocinero para dejar los platos.
Al regresar a la sala del local, el procesado le cogió por los hombros y le dio un rodillazo en la zona genital que provocó que el camarero se cayera hacia atrás y se golpeara con una mesa y después contra el suelo. A consecuencia de la agresión, la víctima, de 26 años, sufrió contusiones con hematoma y dermoabrasión en la parrilla costal izquierda y una herida en el prepucio.
Las lesiones tardaron dos meses en curar y al camarero le quedó como secuela un estrés postraumático leve y una neuralgia intercostal esporádica, así como dolor en el testículo derecho y en la base del pene en erección.