La presidenta del Govern y líder del PP en las Islas, Marga Prohens, ha apelado este martes a la «responsabilidad» de los diputados de Vox ante la crisis que atraviesa la formación presidida en Baleares por Patricia de las Heras. Prohens ha asegurado que la gobernabilidad no está comprometida, a pesar de que los siete diputados de Vox son los que sostienen el Ejecutivo autonómico en este momento. «El Govern sigue con su agenda», ha asegurado la presidenta en Formentera, «seguimos gestionando, hablando de los problemas de Baleares».
Prohens ha insistido en la necesidad de afrontar la situación generada por la implosión de la formación de Santiago Abascal en el archipiélago «con responsabilidad». Sobre todo en lo que afecta al Parlament, pues el presidente de la Cámara, Gabriel Le Senne, es uno de los diputados que ha sido expulsado del grupo, junto a De las Heras. «Hay que resolver esta situación lo antes posible», ha señalado la presidenta, que también ha explicado que ahora será el letrado del Parlament el que diga los pasos a seguir. Le Senne, de momento, se mantiene en el cargo porque, tal y como ha recordado Prohens, «el escrito de su destitución aún no se ha admitido a trámite».
«La gobernabilidad no está comprometida», ha insistido y ha explicado que el PP tiene «un pacto con Vox pero, sobre todo, con los ciudadanos». «Yo seguiré cumpliendo la palabra dada con los ciudadanos», ha añadido, «y este pacto de investidura». Prohens no ha querido pronunciarse sobre la crisis en sí porque, ha dicho, es una cuestión «interna» de Vox. Pero se ha aferrado a que la propia formación aseguró el lunes que lo sucedido no afectará a su acuerdo con el PP. «Ellos han dicho que nada cambia en relación con la estabilidad y la gobernabilidad», ha subrayado Marga Prohens.
La presidenta ha asegurado, finalmente, que tanto a los miembros de Vox como en público, su petición es la de la «responsabilidad» porque, ha subrayado, la situación creada por la crisis entre los diputados de este partido está afectando al funcionamiento del Parlament.
Los cinco diputados díscolos de Vox, Idoia Ribas, Sergio Rodríguez, María José Verdú, Agustín Buades y Manuela Cañadas, pactaron este lunes expulsar del grupo parlamentario a la presidenta de la formación, Patricia de las Heras, y al presidente de la Cámara, Gabriel Le Senne. A nivel nacional, la formación, por orden de su secretario general, Ignacio Garriga, ha comenzado a tramitar la expulsión de los díscolos y, es de esperar, que se tomen medidas cautelares contra los mismos en tanto en cuanto se resuelve esta tramitación. Vox ha mostrado su total apoyo tanto a De las Heras como a Le Senne y, en el caso de este último, ha ordenado que no abandone la presidencia del Parlament, para la que prepara ya informes jurídicos que permitan mantener este cargo. Además, el propio Le Senne ha anunciado este martes que solicitará a los letrados de la Cámara autonómica un informe para saber qué opciones tiene para seguir en el puesto. «Yo no tengo ninguna ambición para seguir en este cargo, que es una carga, que he asumido con sentido del deber pero lo hago siguiendo instrucciones del partido, que es lo que hago ahora, porque soy un hombre de partido», ha afirmado.