El Consell de Mallorca reducirá un 68 por ciento su presencia en las ferias turísticas en 2025, ya que ha confirmado que asistirá a 11 eventos de este tipo frente a los 34 a los que se acudía en 2019 y los 24 de este 2024.
Así lo ha anunciado el presidente de la institución insular, Llorenç Galmés, en su discurso durante la primera sesión del Debate de Política General del Consell de Mallorca celebrado este miércoles y en el que también ha avanzado que con la modificación del Plan de Intervención en Ámbitos Turísticos (PIAT) "no se permitirá crear ninguna plaza turística nueva".
"Cuando el sentimiento de la sociedad es tan unánime, los gobernantes no se pueden poner de perfil. No queda otra opción que adoptar medidas valientes y consensuadas", ha afirmado.
En materia turística, Galmés también ha detallado algunas actuaciones que ha llevado a cabo el Consell en el último año como la incorporación de cinco tramitadores más para agilizar las sanciones contra la oferta ilegal.
Al mismo tiempo se ha reducido el lapso de tiempo en el que se pone en marcha las inspecciones, al pasar de los 58 días en 2023 a entre cinco u ocho en la actualidad. Esto ha permitido doblar el número de inspecciones iniciadas con respecto a las que se habían abierto el año pasado hasta alcancar el cerca de un millar y los expedientes abiertos han crecido un 20 por ciento.
No obstante, ha recalcado que el actual equipo de gobierno se siente "orgulloso" de que el principal motor económico de Mallorca sea el turismo, puesto que "durante décadas ha generado oportunidades, riqueza y bienestar a Mallorca".
Aún así, ha considerado que es el momento de "replantear" la promoción turística de Mallorca e impulsar un "nuevo modelo" de asistencia a las ferias internacionales. "Mallorca no tiene un problema de demanda y no necesita ir a las ferias a buscar turistas", ha puntualizado.
Galmés ha aclarado que el Consell asistirá a las "más relevantes" pero "en ningún caso" se hará la promoción convencional desarrollada hasta ahora de "sol y playa".
Por otro lado, ha reprochado a los partidos de la oposición que su política turística provocara el "mayor incremento de plazas turísticas", algo que ha subrayado que ha puesto "en riesgo la convivencia entre turistas y residentes" y la "principal industria" de Mallorca.