«Personalmente, no creo que los esfuerzos científicos puedan servir al arte. El impresionismo y el cubismo me son extraños. A mi entender, el arte es, sobre todo, un estado del alma». Esta es una de las muchas aseveraciones que dejó Marc Chagall (cuyo nombre verdadero era Moise Zaharovich Segal), el pintor a quien la Fundació Caixa de Catalunya ha dedicado una exposición en sus salas de La Pedrera en Barcelona. «Tradicions jueves» es el título de esta muestra, que continuará abierta al público hasta el próximo día 4 de julio.
«Tradicions jueves», organizada por la Fundación Juan March, contiene 39 obras de este artista nacido en la localidad bielorrusa de Vítebsk en 1887 (y fallecido en 1985), fechadas entre los años 1909 y 1976. Según indican los organizadores, la vida de este pintor «se extiende a lo largo de casi un siglo en el que unos profundos cambios, de los cuales es testimonio y protagonista, transformar varias veces el mundo que le envuelve».
La exposición presenta por primera vez en nuestro país el conjunto del decorado arquitectónico y escénico que Chagall realizó para el Teatro del Arte Judío de Moscú. Según Sylvie Forestier, asesora científica de «Tradicions jueves», Chagall «no deja de ser un enigma, un misterio que se resiste irreductiblemente a cualquier clasificación, a cualquier tipología».