Los problemas que Construcciones Sala, empresa adjudicataria del proyecto de rehabilitación de la torre de Punta Prima, está teniendo para encontrar piedra de marés retrasará los plazos previstos de cumplimiento del proyecto. Las obras de restauración de esta primera fase, tras varios aplazamientos debidos a diversas causas, comenzaron a finales del pasado enero y se estimaba durasen seis meses.
En esta primera fase del proyecto de Josep Ferrer Llaneras, cuyo coste asciende a 20 millones de pesetas, se está restaurando todo el exterior, la escalera de acceso al piso superior y la cubierta. Una segunda hipotética segunda fase contemplaría la restauración del interior. «Así podría ser visitada por estudiantes y turistas interesados». «Esto se hará si se solucionan los problemas de acceso a la torre, que son de dominio privado. El ayuntamiento ya está en conversaciones con los propietarios de la finca y parece ser que llegarán pronto a un acuerdo; cuando esté todo claro, estudiaremos el proyecto de rehabilitación del interior», señaló Fanny Tur.
La torre de defensa de Punta Prima fue construida entre 1760 y 1765. Está situada en la vertiente más oriental de la zona que le da nombre en la isla de Formentera, justo en el borde de un acantilado que se encuentra a 32 metros sobre el nivel del mar. En su construcción se usó mampostería de piedra caliza y mortero de cal, teniendo el cuerpo reforzado con seis nervios de sillares de piedra de marés. Antes de las obras, su estado presentaba grandes deficiencias estructurales ya que estaba derruida en su parte superior de la puerta y en casi todo el conjunto. Desde su construcción sólo fue utilizada como atalaya de vigía.