La segunda conferencia de las XVII Jornades d'Arqueologia Fenício-Púnica, que se celebran hasta el viernes en la Extensión Universitaria corrió a cargo ayer de Adolfo J. Domínguez Monedero, profesor de Historia Antigua de la Universidad Autónoma de Madrid. El título de la ponencia de este acreditado experto en el argumento monográfico del ciclo fue «Fenicios y griegos en occidente: modelos de establecimiento y de interacción».
Domínguez se remontó al siglo VIII a.C. para situar el tiempo en el que los pueblos griegos y fenicios iniciaron su relación. El asentamiento de Pitecusas, en la isla de Ischia, que pasa por ser la primera colonia griega en Occidente, «parece haber contado con una fuerte presencia de individuos de origen fenicio», apuntó el conferenciante, añadiendo también otras islas mediterráneas, como Cerdeña.
«Hay una serie constante de relaciones de tipo comercial que sugieren que la isla no quedó fuera de los intereses comerciales, y de otro tipo, de los griegos». También mencionó a Sicilia, «un buen ejemplo de comunidades fenicias y griegas compartiendo un mismo espacio geográfico, lo que permite avanzar en sus procesos de interacción, especialmente durante el período arcaico y antes del desencadenamiento de período de guerras que caracterizará parte del siglo IV en este territorio».