S. M. DEBELIUS.
La Galería Can Daifa de Santa Eulària inaugura esta tarde a las
18'00 horas la primera exposición en la isla del artista Salvador
Montó. Son un total de trece cuadros recientes, de temática con
paisaje urbano, marinas y composiciones o bodegones, una variada
selección para dar a conocer su obra.
Salvador Montó vive de lo que más le gusta, de lo que siempre había sido su vocación y de algo a lo que nunca le había podido dedicar el tiempo necesario. «Yo pinto desde siempre, pero a nivel profesional, trabajando con galerías y dedicándome plenamente a ello, sólo desde 1992. Antes de eso había hecho antes algunas exposiciones de las que organizan las casas de cultura. Luego, siguiendo los consejos de una persona, que en ese sentido me orientó muy bien, empiezo a presentarme a concursos nacionales de pintura. En uno de ellos que se celebró en Salamanca, un galerista de Madrid vio mi obra y a partir de ese momento, que era el mes de septiembre, ya me dió fecha para exponer en noviembre de ese mismo año. A raíz de ahí, un poco obligado por la demanda, dejé las oposiciones porque no podía compaginar las dos cosas y porque lo de la pintura empezó a funcionar muy bien, cosa que me sigue ocurriendo. Por suerte, puedo vivir haciendo lo que más me gusta, porque para mí es algo vocacional. Yo tenía ese deseo íntimo, no sólo porque me gusta pintar, sino porque es otra forma de vida en la que tú te organizas el trabajo y además puedes viajar», comentó al artista. «Aún así, siempre he tenido presente que era un mundo muy complicado. Sobre todo cuando empiezas, porque las galerías con darte una oportunidad ya es demasiado y tu futuro depende mucho de esa exposición», añadió recordando sus inicios.