EFE-CARLOS DEL AMO
«Marca registrada» es el título del doble CD y DVD de Rosana, el
primero sale mañana lunes a la venta y el segundo el 8 de
diciembre. La compositora explicó a EFE que su «marca registrada
radica en ser optimista, positiva y con ganas de tirar pa lante. Me
gusta pensar en las cosas buenas y dar la vuelta a las malas».
Rosana explica que, «en realidad», «Marca registrada» (Universal), son «tres álbumes en uno: un DVD, un grandes éxitos y un disco nuevo». La idea de hacer un álbum en directo surgió porque «el público que va a los conciertos ya llevaba tiempo pidiéndolo». Pero cuando se pusieron a prepararlo, ella ya tenía material para hacer uno de temas inéditos y «muchas ganas de enseñar canciones nuevas, por lo que ante la duda» hicieron las dos cosas. Entregar nuevos temas y, en paralelo, regalarles lo que nos estaban demandando». «Luego -comentó- surgió la otra duda, dónde grabarlo, en un sitio grande o un aforo pequeño, con un sonido festivo y veraniego, o más tranquilo e íntimo, y como cuando vamos de gira, hacemos las dos cosas, decidimos mezclarlo» y así grabaron una primera parte el 29 de agosto en Manilva (Málaga), ante 15.000 personas, y una segunda el 8 de octubre en el Teatro Coliseum de Madrid, ante más de un millar de fans.
Después se tomó la decisión de grabar también un DVD con los dos conciertos completos, con temas repetidos en los dos formatos, un documental de cómo se hizo, una entrevista, galería de fotos y «una cosa que se llama huevo de pascua, que son tres sorpresas que hay que encontrarlas para poder verlas». La gente podrá encontrase con «dos conciertos muy diferentes. Málaga con doce músicos y un sonido más eléctrico, planteado para que la gente lo bailase, y Madrid, más intimista y acústico con cuatro músicos. Quizá todo esto se nota más en el DVD que en el audio».
En este nuevo trabajo hay canciones muy conocidas como «El talismán», «A fuego lento» o «Contigo», a las que Rosana ha dado «una vuelta de rosca. Son canciones viejas por el tiempo, pero no en el sonido, y si algo no queríamos es que la gente volviese a tener lo mismo de ellas. En algunos casos, el resultado es sorprendente, sobre todo, por la contundencia y la fuerza. Sonidos antes pausados como en Bebes de mí , ahora son muy eléctricos, pero todo sigue siendo cercano y sin grandes cambios». También hay «una nueva sonoridad» que marcan canciones inéditas como «No habrá Dios» y «Bajo charcos», pero en general este disco «es un escaparate de lo que hacemos en directo, no es que marque una nueva orientación hacia un sonido distinto».