LUCIANA AVERSA/CRIS CUEVAS
La noche del viernes quedó claro que el público de Eivissa está ansioso por reír. Una sala llena -la discoteca Kiss-El Sol, en Platja d'en Bossa- evidenciaba que no sólo de drama y denuncia social viven los aficionados a la escena y que el humor es una baza a jugar en la limitada oferta a disposición de los ibicencos.
Abiertas las puertas a las diez de la noche del viernes, los aficionados al humor fueron calentando ánimos con la Ibiza Groove Band, que darían paso a la primera actuación de la noche: Roser, debutante local, dispuesta a analizar algunos de los entresijos más chocantes del sexo. A continuación, su compañera de la 'cuota local' Naihara reconocía su incondicional afición por esta práctica y lo que esto condicionó su vida para, como colofón, el guionista y monologuista del canal Paramount Comedy Fernando Villena, que rememoró cómo sus relaciones familiares -madre, padre, abuelo y abuela han tenido papeles destacados en su vida- han hecho de él lo que es. Y como colofón, las lecciones para enfrentarse al otro sexo con éxito con demostración en vivo. El programa humorístico tuvo continuación ayer por la noche en la sala de Platja d'en Bossa.