Hacía frío, bastante frío, pero nada impidió a los centenares de seguidores de Siniestro Total perderse la tercera actuación del grupo gallego en la isla, pese a que ya ha llovido mucho desde los tiempos de la 'movida'. El recital debía iniciarlo Peter Colours, pero por enfermedad de uno de sus miembros no pudo ser, algo que también sucedió con sus sustitutos, Can Raia. Finalmente, fue Blues Mafia el grupo encargado de calentar motores para las estrellas de la noche.
Y allí estaba Siniestro Total, con Julián Hernández a la cabeza y dispuesto a revivir toda su historia musical sobre el escenario habilitado en la plaza de la iglesia de Sant Josep. Parecía mentira, pero Siniestro Total volvía de nuevo a la carretera con veinticinco años de carrera a sus espaldas.
Mientras un grupo de punkies disfrutaban a su ritmo saltando y empujándose en las primeras filas, parte del público recordaba dónde estaba en aquellas años ochenta. Y en esto, llegó Bailaré sobre tu tumba, y todos los asistentes cantaron y bailaron en abierta comunión. El frío ya no importaba. Los recuerdos sí.