El Azul Café (Isidoro Macabich, 23, Eivissa) acogerá a las 20,30 horas de hoy martes la inauguración de una exposición de pinturas de Lizzy Bolmacher. Muestra que dará el relevo a la de El Industrial que ahora acaba con la lectura de su manifiesto creativo.
Lizzy Bolmacher (Munich, 1946) falleció en Eivissa en 2002. Según explica el responsable del Azul Café, «siempre le gusto pintar, pero se dedicaba a ello como un hobby. Su única exposición se hizo aquí en 2001». La obra que se presenta desde hoy hasta el 3 de marzo es propiedad de su hija.
Lizzy Bolmacher fue una niña de la posguerra que nunca conoció a su padre, un soldado americano que regreso a su país si saber de su existencia. Con vocación de pintar y de carácter rebelde desde pequeña, estudió escaparatismo. Se casó a los 18 años para poder irse de casa, pero aquella unión duro poco. Volvió a casarse a los 26 con el padre de sus tres hijos. En 1975 se fue a la India con dos de sus hijos; volvió a Munich y no se adaptó, así que decidió establecerse con sus hijos en Eivissa en 1981. «Fue una persona extrovertida, capaz de reírse de sus desgracias».