Guillem March (Palma, 1979) trabaja en exclusiva desde hace cinco años para la editorial norteamericana DC Comics. Sumergido por completo en el mundo de los superhéroes, su trabajo puede verse en la sala capitular del Ayuntamiento de Vila, donde, junto a Paco Díaz (Port de Pollença, 1967) y Tomeu Morey (Palma, 1978) protagoniza la exposición Herois. Els autors de les Illes Balears al mainstream americà, inaugurada en la tarde de ayer.
Durante la presentación de la muestra, March se mostró muy satisfecho de exponer en un lugar como la sala capitular y en verano. «Herois se mostró en el Saló del Còmic de Barcelona, que, como profesional, es un lugar muy importante, pero a nivel personal me gusta más exponer aquí», afirmó el dibujante, quien excusó la ausencia de Díaz debido a «un pico de trabajo» y de Morey, que se encuentra en su luna de miel.
Sobre el auge actual del mundo del cómic de superhéroes y su relación con el impacto cinematográfico logrado por varias sagas inspiradas en él, March consideró que este nuevo repunte del cómic tiene una cierta relación con las películas, aunque personalmente tenga alguna reserva acerca de la relación entre ambos mundos. «Podría decirse que los cómics son como el departamento de I+D del cine. Trabajamos generando historias y estética que luego el cine puede aprovechar», mencionó el dibujante, que subrayó que, para él, «el cine es una competencia». «Las películas tienen una serie de niveles de impacto brutales, con explosiones y acción continua. Por el contrario, mi página no tiene sonido ni movimiento, así que continuamente tengo que crear nuevas maneras de impactar al lector, porque la exigencia es cada día mayor».