Que con los libros podemos viajar a multitud de mundos diferentes, vivir apasionantes aventuras o conocer a grandes personajes es un hecho. El problema es que en invierno no tenemos tiempo de viajar a otros mundos, estamos demasiado cansados para vivir aventuras y nos da pereza conocer gente nueva. Por eso el verano, con sus vacaciones, es una de las épocas del año en la que más se lee, y todos los libreros coinciden en algo: la novela es la reina de la fiesta.
«Lo que más viene a buscar la gente es narrativa, tanto juvenil como para adultos», señala Sergio González, librero de Literanta. «En concreto, muchos clientes me dicen que acumulan libros de novela negra durante todo el año para poder leerlos en verano. Es un género que engancha mucho por los diálogos y las tramas de investigación». Unos de los más destacados en este aspecto son la saga de Dolores Redondo, El guardián invisible y Legado en los huesos, o La rubia de los ojos negros, de Benjamin Black.
Para Marina Taura, librera de Jaume de Montsó, se están «vendiendo mucho las novelas, la gente busca historias que les entretengan para llevarse a la playa. Además compran bastante el formato de bolsillo, especialmente en catalán, que es la única forma en la que se vende». Destaca también «las ofertas que hacen editoriales como RBA o Alianza, quienes establecen precios de entre cinco y diez euros por los libros, y así consiguen atraer a más lectores». Marta Llompart, de la librería Quart Creixent, apunta que «la gente busca lecturas ligeras, tanto en contenido como en tamaño, ya que tienen mucho éxito los libros de bolsillo».
Otras de las opciones más demandadas en novela son los premios Pulitzer de este año y el pasado. En El jilguero, Donna Tartt cuenta la historia de Theo Decker, un adolescente que ve morir a su madre en un atentado terrorista en el Museo Metropolitano de Nueva York. Por su parte, El huérfano, de Adam Johnson, es una historia de amor y espionaje que transcurre en Corea del Norte.
Literatura juvenil
En el terreno juvenil triunfan los libros convertidos en películas, teniendo especial éxito la novela del exitoso John Green, Bajo la misma estrella, llevada a la gran pantalla por Shailene Woodley y Ansel Elgort. «Los jóvenes, sobre todo las chicas, lo están pidiendo muchísimo. Hacía tiempo que no veía algo así», apunta González. «De hecho, se está dando el caso de que nos lleguen libros con tramas muy parecidas, incluso con las portadas prácticamente idénticas que intentan aprovechar el tirón de este, pero apenas se venden. No les está yendo demasiado bien».
John Green también ha conseguido colar entre los libros más vendidos de El Corte Inglés otra de sus novelas, Ciudades de Papel, también dedicada al público juvenil. Además, continúan en el candelero las sagas de Divergente, de Veronica Roth, y Los juegos del hambre, de Suzanne Collins.
Para los más pequeños, las elecciones más populares son los ya clásicos libros de Geronimo Stilton, El diario de Greg para los niños y El diario de Nikki para las niñas.
Pero no todo en el mundo literario son novelas, la poesía y el ensayo, aunque menos populares, también tienen cierto público. «A quien le gusta la poesía y el ensayo los sigue comprando, pero son pocos», explica Taura. «El ensayo tiene mucho más éxito en invierno, cuando la gente suele adquirir libros en relación con sus profesiones», añade Glòria Fortesa-Rei, librera de Embat. «Consideramos que un libro de poemas destaca cuando se han vendido tres o cuatro ejemplares», detalla González. Algunos de los títulos más populares al respecto son Álbum Blanco, de Antonio Rigo; Fulles d'herba, de Walt Whitman; El rastre blau de les formigues, de Ponç Pons, o Yo fui a EGB, libro que evoca los recuerdos de todos los nacidos en las décadas de los setenta y ochenta y que ya va por la decimotercera edición.