La galería P|ART Ibiza acoge mañana a las 20.00 horas la presentación de la muestra Gustavo, compuesta por esculturas creadas por el artista ibicenco Andreu Moreno y protagonizada por una pieza que representa a un cocodrilo de fibra de vidrio que se llama precisamente así. La pieza mide casi cinco metros, pesa 90 kilos y, según el artista, fue construida en 500 horas de trabajo.
En la inauguración el propio escultor explicará que esta exposición «es el reflejo de los contrastes que actualmente vive la isla» y que su intención «es llevar a la sociedad a la reflexión» y que viendo las primeras reacciones de la gente ha logrado su propósito.
Como concreta Moreno en sus obras quiere «preguntar al espectador por qué algunos espacios se cuidan tanto y otros se abandonan completamente». Por ello, durante el evento se proyectará un documental que recoge el nacimiento de la escultura protagonista de la muestra en el marco de una acción artística, a modo de perfomance.
A Gustavo le acompañarán otras esculturas de caracoles que reproducen «el gran problema que sufre actualmente la isla con la falta de vivienda y cómo la llegada de turistas durante la temporada alta está dejando sin casa a muchos profesionales que llegan a la isla a trabajar y se tienen que marchar».
Hace dos años Gustavo fue colocado 24 horas en las aguas del torrente de sa Llavanera, frente a Ibiza Gran Hotel, para ver la respuesta de los viandantes al ver un cocodrilo fuera de su hábitat en mitad de la ciudad. Y el resultado fue el esperado ya que la gente quedó muy sorprendida y algunos no supieron si era real o no».