Iberdrola prevé invertir 24.000 millones de euros durante el periodo 2016-2020. Emprenderá una nueva fase de crecimiento en la que mantendrá el desarrollo de un modelo de negocio sostenible y creador de valor a largo plazo para sus accionistas.
Esta nueva etapa que ahora comienza para la eléctrica presidida por Ignacio Galán servirá, asimismo, para consolidar un proyecto empresarial líder mundial, que destaca por su apuesta por la internacionalización, el desarrollo tecnológico y las energías más limpias y eficientes.
En esta línea, Iberdrola está impulsando iniciativas energéticas vanguardistas de relevancia mundial, como, por ejemplo, el parque eólico marino de Wikinger, que construye en Alemania; el Western Link, un cable submarino que unirá Escocia y Gales; la línea de interconexión entre Estados Unidos y Canadá a través de Maine; o la puesta en marcha de seis nuevas centrales de producción eléctrica en México.
PARQUE EÓLICO MARINO. El parque eólico marino de Wikinger, en Alemania, se trata del proyecto renovable más importante que está desarrollando en este momento Iberdrola. Esta instalación, que está situada en aguas del mar Báltico, será la segunda eólica marina de la compañía, tras la puesta en marcha en Reino Unido, a finales de 2014, del parque de West Of Duddon Sands (Wods). Wikinger supondrá una inversión de cerca de 1.400 millones de euros y dispondrá de una potencia de 350 megavatios (MW), cubriendo las necesidades de más de 350.000 hogares alemanes y evitando la emisión a la atmósfera de casi 600.000 toneladas de CO2 al año. Estará ubicado a unos 75 kilómetros de distancia de la costa, donde la profundidad oscila entre 37 y 43 metros. Iberdrola tiene previsto instalar 70 aerogeneradores de 5 MW de capacidad unitaria, cuya tecnología será aportada por el consorcio Adwen, formado por Areva y Gamesa.
CABLE SUBMARINO. El cable submarino en Western Link (Reino Unido) está valorado en 1.200 millones de euros. El Western Link implica la construcción de una interconexión submarina entre Escocia y Gales y va a ser un proyecto clave para la mejora del suministro eléctrico de Reino Unido.
Se trata de 420 kilómetros de cable submarino de corriente continua de alta tensión entre la costa oeste de Escocia y la Bahía de Quay, en la costa norte de Gales. Con este proyecto se aumentará la capacidad de interconexión entre Inglaterra y Escocia en más de 2.000 megavatios (MW), capacidad suficiente para abastecer la demanda eléctrica de más de 4 millones de hogares cada año.
El proyecto es bidireccional, permitiendo que el flujo de electricidad se dirija hacia el norte o el sur en función de las necesidades de suministro y la demanda de electricidad.
INTERCONEXIÓN. La interconexión eléctrica entre Maine y Canadá es un gran proyecto desarrollado por la filial estadounidense de Iberdrola, Avangrid, que destaca por su magnitud, ya que conecta a los estados del norte de USA con Canadá a través de una nueva red de alta tensión por la costa este. Se realiza, además, en uno de los mercados más competitivos del mundo.
La obra ha supuesto una inversión cercana a los 1.400 millones de dólares y en ella se han construido 800 kilómetros de líneas de transporte de energía eléctrica, con cinco nuevas subestaciones, beneficiando las interconexiones eléctricas entre Massachusetts, New Hampshire y Maine, así como entre este último estado y Canadá.
MÉXICO. Iberdrola construirá seis nuevas centrales de generación en México. La decidida apuesta por este país se está plasmando en una inversión internacional sin precedentes, centrada en el sector de la generación tradicional y las energías renovables.
Iberdrola está presente en México desde hace 18 años. Es un país en el que de forma ininterrumpida ha ido incrementando sus inversiones y actividades hasta consolidarse como el mayor productor de electricidad privado, con más de 5.400 MW en operación, entre centrales de ciclo combinado y parques eólicos, capaces de dar servicio a una población de alrededor de 20 millones de mexicanos.
Iberdrola dispone en estos momentos en México de proyectos de generación de energía en construcción que suman cerca de 2.000 millones de dólares de inversión. En concreto, construye tres nuevas plantas de ciclo combinado (Baja California III, Dulces Nombres II y Escobedo) y tres cogeneraciones (Ramos Arizpe, San Juan del Río y Altamira).