Los alcaldes no saben cómo hacer frente a la zonificación del alquiler vacacional, en palabras textuales un “marrón” que le han pasado el Govern y los consells.
La modificación de la Ley del Turismo, que entró en vigor el 1 de agosto, establece una moratoria de nuevas licencias de alquiler turístico. Además, indica que los consells insulars y el Ajuntament de Palma -el único con competencia urbanística- disponen de 12 meses como máximo para establecer y aprobar la zonificación, que debe situar qué zonas se declaran aptas para la comercialización de estancias turísticas en viviendas y cuáles no. En Mallorca la zonificación entrará dentro del Pla d'Intervenció en Àmbits Turístics (PIAT) de Mallorca, que debe contribuir a ordenar la actividad turística de Mallorca en relación a la ordenación del territorio. En estos momentos se ha aprobado el avance del PIAT, para el que se ha abierto un periodo de exposición pública para aportar sugerencias. Una vez se lleve a cabo la aprobación inicial, a finales de año, los ayuntamientos emitirán un informe que puede ser más restrictivo que el Consell en cuanto a la zonificación, pero no menos. Además, la consellera de Territori del Consell Mercedes Garrido y el vicepresidente del Govern y conseller d'Innovació, Recerca i Turisme Biel Barceló anunciaron en rueda de prensa que a las cuatro zonas maduras que ya existen se añadirán dos nuevas: Cales de Mallorca y Cala Millor-Cala Bona-Son Morro-s'Illot, en las que no se permitirían nuevas plazas.
Ante esta situación, los alcaldes saben que tendrán que enfrentarse a este “marrón”, pero no saben cómo hacer el informe, en qué criterios basarse, ni en qué plazos hay que presentarlo.
Antoni Servera, alcalde de Son Servera (Independents), habla claro: “Esto es un marrón que nos va a crear mucha polémica. El tema de la zonificación tenemos que estudiarlo porque tenemos varios núcleos de población con características muy diferentes. Lo que está claro es que buscaremos el consenso de todo el Consistorio. Y por otra parte no entendemos cómo el Consell ha podido catalogar nuestra área como zona madura; cuando lo leí no daba crédito. Creo que por parte del Consell existe un desconocimiento total de nuestra zona. Nos tratan de zona madura muy degradada cuando la mayoría de nuestros hoteles se han reformado, también muchos apartamentos, y el ayuntamiento también ha invertido mucho en mejorar las zonas turísticas, sobre todo Cala Millor. En los últimos diez años hemos invertido más de 10 millones de euros. Consideramos que la responsabilidad de ofrecer un turismo de calidad es de todos, de los hoteles y del municipio, y hemos trabajado para mejorar”, explica.
Mateu Puigròs (Grup Independent de Son Carrió), alcalde de Sant Llorenç, explica que consideran que el avance del PIAT es muy genérico y que, en principio, el equipo de gobierno municipal está “en contra del alquiler vacacional en plurifamiliares en cualquier zona”, pero que no es definitivo. Respecto a la consideración de Cala Millor como zona madura, tienen que estudiarlo más en detalle antes de tomar un posicionamiento.
El alcalde de Campos Sebastià Sagreras (PP) comenta que es partidario de permitir el alquiler turístico en todo el municipio: “No tenemos instrucciones sobre cómo abordar la zonificación, si debe obedecer a algunos porcentajes o criterios que se decidan. En principio, somos partidarios de permitir el alquiler vacacional en todas las tipologías de viviendas unifamiliares en todo el municipio. Plurifamiliares solo tenemos en el núcleo de Campos. Respecto al alquiler turístico, sobre todo se da en las casas de pueblo y en el campo, y no nos han llegado problemas de ningún tipo”, especifica Sagreras.
Desde Algaida, su alcaldesa Maria Antònia Mulet (PSOE) afirma que no han abordado esta cuestión porque “prácticamente no nos afecta y no nos preocupa”. Por su parte, la primera vara de Montuïri, Joan Verger (Més), da una respuesta prácticamente idéntica: “El tema de los pisos no nos afecta y no hemos abordado el tema de la zonificación”.
Igual que el alcalde de Felanitx Joan Xamena (Bloc per Felanitx) explica que “no estudiaremos la zonificación hasta que no se pronuncie el Consell”.
Por su parte, el alcalde de Santa Margalida Joan Monjo (Convergència per Santa Margalida-El PI) también indica que esperarán a conocer la opinión del Consell.
Xisco Martorell, alcalde de Santa Eugènia (PP), indica que en su municipio no hay apenas propiedad horizontal, pero sí ha notado que muchos propietarios están preocupados. “Existe mucha desinformación”, afirma, pero se muestra totalmente a favor del alquiler vacacional porque “muchas casas se han podido arreglar gracias a estos ingresos”.
Por su parte, Joan Sastre, alcalde de Selva (el PI), explica que tampoco tienen pisos, como mucho planta baja y primer piso, pero que en los cuatro núcleos hay una parte importante de agroturismos y también viviendas vacacionales. Afirma que es partidario de regular, pero “antes hay que estudiar si los servicios, sobre todo el agua y la gestión de los residuos, pueden soportar a mucha más población, especialmente en verano”.
En Pollença la mayoría de plazas turísticas son de viviendas (unas 13.000, el 70% de la oferta reglada), frente al 30% de plazas hoteleras (7.700 entre hoteles y aparthoteles). Además, existe un número indeterminado de pisos que este verano se han tenido que retirar de las webs de alquiler vacacional, según explica el alcalde Miquel Àngel March (de la coalición Junts Avançam). “En Pollença, sobre todo en el Moll, existe desde hace 60 años una gran cantidad de pisos que tradicionalmente se han alquilado”. March explica que el Ajuntament se está reuniendo con diferentes colectivos, asociaciones, vecinos y partidos políticos de la oposición para intentar consensuar una posición común. Asimismo, indica que están “a favor de que se regulen los pisos en ciertas zonas con límites”. No obstante, no pronunciarán su posición hasta conocer la decisión del Consell de Mallorca.
En una situación similar se encuentra ses Salines, con el núcleo turístico de la Colònia de Sant Jordi. Su alcalde, Bernat Roig (Endavant) explica que no han tenido quejas, aunque sí ha habido ciudadanos que han expresado al ayuntamiento su posición favorable al alquiler turístico. Afirman que “prohibir más plazas turísticas está descartado pero, al estar en minoría, cualquier decisión que tomemos una vez conocida la aprobación inicial del PIAT deberá ser consensuada”.
El alcalde de Manacor Pedro Rosselló (PP) explica que “están valorando el documento inicial del PIAT”, igual que Antoni Mir (el PI), alcalde de Alcúdia, quien afirma que no han estudiado el tema porque no les han informado de qué criterios seguir.
Alfonso Rodríguez (PSOE), alcalde de Calvià, afirma que después de desaparecer los Planes de Ordenación de Oferta Turística (POOT) se veía “necesario” realizar estos PIATS, lo que consideran muy buena noticia. “Últimamente se esta incrementando la presión humana en zonas ya maduras en Calvià, por lo que es necesario que estos instrumentos permitan a los municipios, dependiendo de sus características, regular la presión humana tanto por incremento de plazas hoteleras como por el crecimiento del alquiler turístico. Estos planes han de ser un buen instrumento para regular esta presión humana, tanto por el incremento de plazas hoteleras como por el enorme aumento de alquiler residencial”.
Martí Fornés (Convergència Democràtica Murera), alcalde de Muro, afirma que “no veo una zonificación porque todas las zonas son similares, Muro es una zona sobre todo hotelera, con pocos pisos”.