El debate sobre el futuro del sistema público de pensiones del país está más abierto que nunca. Pedro Ballester, director territorial de Banco Sabadell en Balears, considera que lo más importante es que las futuras reformas vayan precedidas de un debate público informado con la participación de todas las partes interesadas y que se tomen con un amplio consenso político y social que asegure un entorno sostenible y predecible a futuro, condición necesaria para que los ahorradores puedan planificar adecuadamente sus decisiones de inversión.
¿El ahorro privado es la salvación para tener una jubilación digna?
El actual sistema público de pensiones se definió en los 60 bajo un modelo de solidaridad intergeneracional. Los trabajadores en activo financian las prestaciones de los pensionistas. Las condiciones bajo las que se configuró han cambiado. Los aspectos demográficos inciden de manera crítica en la sostenibilidad del modelo. España es el país con menor tasa de fertilidad de la Unión Europea y uno de los países con mayor esperanza de vida, y con una tendencia creciente. Un indicador relevante es la relación entre el número de cotizantes y pensionistas ha ido disminuyendo en los últimos años, siendo de 2,2 a finales de 2017, mientras que diez años antes era de 2,7. Esto tiene una gran repercusión en los sistemas de reparto como el modelo español.
¿Qué habría que hacer con el actual sistema de pensiones?
Es necesario revisar el sistema público tanto por la parte de su financiación como por su nivel de cobertura. Algunos expertos cifran esa revisión en términos de la cobertura futura en niveles inferiores al 50% de la tasa de sustitución, un gran cambio a la baja frente a la situación actual, del 80%. Y en cualquier caso, será necesario complementarlo con el ahorro privado para que nuestro nivel de vida se mantenga después de la jubilación.
Se dice que España no ahonda en esa cultura porque también nos gusta vivir el presente. ¿Está de acuerdo con esta afirmación?
Hay diversos factores que han influido en que el ahorro para la jubilación no haya evolucionado en España con el mismo crecimiento que en otros países desarrollados. Por un lado, la propia crisis económica y la situación del mercado laboral con tasas de desempleo actuales del 15% han incidido en un menor ahorro financiero. También influye la propia distribución del ahorro entre los hogares españoles, en donde el componente inmobiliario llega a niveles del 75% del patrimonio familiar, siendo España uno de los países de la OCDE en donde el ahorro financiero per cápita es más bajo. Y, quizás por encima de todo ello, señalar la falta de previsión y de cultura financiera en nuestra sociedad. Ello exige mejorar la educación y cultura financiera así como una mayor información y transparencia en la información de las coberturas públicas y privadas para poder tomar decisiones de planificación en el largo plazo.
¿Ahorrar es sinónimo de gastar menos?
Todo empieza por desarrollar la cultura del ahorro y mi recomendación es iniciarla mediante el ahorro periódico desde el primer empleo. Planificarse financieramente desde una temprana edad supone tomar el control sobre nuestro futuro. Con el asesoramiento adecuado podemos llegar muy lejos y afrontar el futuro con más confianza.
Ciertos niveles salariales tampoco facilitan pensar en un plan de pensiones.
Se puede contratar un plan de pensiones o fondo de inversión a partir de una aportación de 30 euros, y posteriormente aumentarla de manera progresiva. La inversión en productos sofisticados de ahorro es accesible a casi todo el mundo. El perfil temporal de las inversiones en planes de pensiones permite beneficiarse de las tendencias de largo plazo de activos de más riesgo pero mayor rentabilidad, como la renta variable, y hacer crecer el capital invertido con el objetivo de mantener el nivel de vida que nos gustaría en nuestra jubilación.
¿Qué soluciones de futuro aportan a sus clientes?
Recomendamos la gama de planes de pensiones de ciclo de vida que en nuestro caso es el Sabadell Planes Futuro. Es un producto que mantiene un mayor posicionamiento en renta variable para, a medida que se acerca la edad de jubilación de los partícipes, ir rebajando la inversión. Sabadell Planes Futuro ofrece soluciones personalizadas, adaptándose al cliente en función de dos variables: la fecha prevista de jubilación y el perfil de riesgo.
Y quien no tenga hoy un plan privado y crea que no llega a tiempo porque es demasiado mayor para tenerlo...
Si está cercano a la jubilación requerirá que ahorre más que si lo hubiera contratado con anterioridad. En este caso, es clave el asesoramiento para la elección del importe a aportar y del producto que se adecue mejor a su perfil. Los productos con interés garantizado, como los Planes de Previsión Asegurados (PPA) para clientes más conservadores y próximos a su jubilación, y los Planes de Pensiones Individuales, con distintas estrategias de inversión y niveles de riesgo, ofrecen soluciones a todo tipo de situaciones.