El ministro de Asuntos Exteriores de España, Miguel Àngel Moratinos, se reunió ayer en La Habana con su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, y con el cardenal Jaime Ortega, dentro de su visita a la isla para apoyar el diálogo sobre los derechos humanos, la cual confía será «exitosa».
Ambos ministros resaltaron el buen momento de las relaciones entre Cuba y España, y dejaron claro el deseo de un nuevo marco de relaciones de La Habana con la UE para superar la «posición común».
Vigente desde 1996, la llamada 'posición común' condiciona las relaciones del bloque europeo con Cuba a avances democráticos y en materia de derechos humanos en la isla.
«Esfuerzo español»
Por su parte, Bruno Rodríguez destacó que la visita a la isla del jefe de la diplomacia española se produce en un «momento promisorio» en las relaciones de ambos países. El canciller cubano insistió en que la 'posición común' es un «obstáculo insalvable» para la normalización del vínculo entre Cuba y la Unión Europea, y mencionó el «esfuerzo» de la presidencia española del bloque para propiciar la mejoría de las relaciones.
Tras la reunión se celebró una sesión de trabajo con delegaciones de los ministerios de Exteriores de ambos países.
Posteriormente Moratinos se entrevistó con el cardenal Jaime Ortega, arzobispo de La Habana y principal interlocutor de la Iglesia católica con el Gobierno de Raúl Castro en las gestiones en favor de los derechos humanos y los presos políticos.
La visita de Moratinos ha reforzado las expectativas de que se produzcan próximamente liberaciones de presos políticos.
La llegada de Moratinos a Cuba desata las expectativas de los presos políticos
Efe | La Habana |