Los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del Grupo de los Siete países más industrializados (G-7) sostendrán una conferencia telefónica hoy martes, en una señal del aumento de la alarma global sobre las tensiones en el bloque de 17 naciones que comparten el euro.
Después de que Grecia, Irlanda y Portugal recurrieran a programas de rescate internacional, los mercados financieros están alertas sobre los riesgos de una crisis bancaria en España y unas elecciones generales griegas prevista para el 17 de junio, que podría llevar a que Atenas abandone el euro.
El ministro de Finanzas canadiense, Jim Flaherty, dijo que sus pares y banqueros centrales de Estados Unidos, Canadá, Japón, Gran Bretaña, Alemania, Francia e Italia sostendrían una teleconferencia especial, elevando la presión para que los europeos actúen.
«La real preocupación en estos momentos es Europa por supuesto, la debilidad en algunos de los bancos en Europa, el hecho de que están subcapitalizados, el hecho que otros países europeos en la zona euro no han tomado suficientes acciones aún para abordar esos problemas de subcapitalización de bancos y construir un adecuado cortafuegos», dijo Flaherty a periodistas.
Por su parte, el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, defendió ayer la posibilidad de que la banca europea pueda recurrir al fondo de rescate europeo permanente para recapitalizarse directamente sin que lo tengan que pedir los Estados miembros, en el marco de la propuesta para crear una unión bancaria.
«Vemos importante considerar esta alternativa de recapitalización bancaria directa dado que ahora estamos avanzando en la discusión sobre las posibles vías y medios para crear una unión bancaria», explicó Rehns.
El vicepresidente del Ejecutivo comunitario ha reconocido que «por el momento» y «en su forma actual» esta recapitalización directa «no forma parte» del Tratado que regula el fondo de rescate permanente.