La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) elevó este viernes a 30.000 el número de palestinos desplazados en Gaza, después de que cerca de 8.000 huyeran de sus casas este viernes por miedo a la incursión terrestre iniciada por Israel.
En un comunicado enviado a los medios, el portavoz de la UNRWA en la zona, Chris Gunness, advirtió de que el número de desplazados crece cada hora y reveló que la agencia ha abierto ya 34 centros de acogida para dar refugio seguro a la población civil en toda la Franja.
«El número de desplazados a causa de los combates que han buscado refugio en las escuelas de la UNRWA ascendió hoy a 8.000 y va en aumento. Ahora son ya 30.000 las personas que están alojadas», explicó.
«A causa de la violencia y la inseguridad, particularmente en el sur, los números fluctúan. La UNRWA ahora ha establecido 34 centros de emergencia a lo largo de toda la Franja. Instamos a las dos partes en conflicto a respetar la ley internacional para los civiles en conflicto», agregó.
El Ejército israelí emprendió anoche una incursión terrestre en Gaza, que como primera consecuencia tuvo un recrudecimiento de los bombardeos en el norte y el sur de Gaza, en particular en las localidades septentrionales de Beit Lahia y Beit Janun.
Días antes, y en medio de intensos bombardeos aéreos, Israel avisó a la población de ambas barriadas, calculadas en unas 100.000 personas, que abandonaran sus casas lo que causó un primer flujo de desplazados.
La UNRWA ya advertido de que solo tiene capacidad para guarecer a unas 50.000 personas, y que sus reservas están limitadas en el tiempo.
Aparte de las escuelas de la UNRWA, los gazatíes no tienen otro lugar para huir, ya que Israel impone un asedio militar por tierra y mar sobre la Franja, y Egipto mantiene cerrado el único paso para personas que comunica Gaza con el resto del mundo.
Hasta el momento, cerca de 270 personas, en su mayoría civiles palestinos, han muerto y más de 2.000 han resultado heridos en los once días de bombardeos israelíes sobre Gaza. EFE