Los familiares de Miguel Pajares, el sacerdote infectado por el virus del ébola en Liberia, han confirmado que sigue estable y sin sufrir hemorragias, ha explicado a Efe el hermano del religioso, quien reconoce que las noticias son «tranquilizadoras».
Emilio Pajares ha indicado a EFE que, según el parte médico que les dieron anoche, Miguel no tiene fiebre y no ha sufrido hemorragias, uno de los principales riesgos del ébola, situación que les hace vislumbrar una recuperación.
El familiar apuntó que las últimas informaciones que han recibido respecto a la situación de Miguel por parte de los servicios médicos que le atienden en el Hospital Carlos III de Madrid son «tranquilizadoras, porque parece que está estable».
El hermano del religioso también ha explicado que hasta ahora las noticias sobre la evolución del sacerdote son escasas.
«Tenemos pocas noticias, ahora nos toca esperar y que siga con una evolución como hasta ahora», ha recalcado Emilio Pajares.
En este sentido, los familiares aún no han recibido notificación por parte de las autoridades sanitarias para poder visitar a Miguel: «Cuando nos digan, iremos, pero ahora lo que nos interesa es que siga estable».
Desde el municipio toledano de La Iglesuela, de donde es natural el sacerdote, se han mostrado hoy más esperanzados con una recuperación de su vecino.
«Sí, tenemos esperanzas de que pronto esté bien», ha recalcado su hermano.
Miguel Pajares continúa aislado en la sexta planta del Hospital Carlos III, donde se han habilitado tres habitaciones para su atención médica.