El artista estadounidense Pharrell Williams alertó este miércoles en Davos de la seriedad del calentamiento global y destacó la importancia de «lograr las condiciones perfectas en este mundo».
Williams, que es director creativo de Live Earth desde 2007 y de la empresa de soluciones ecológicas Bionic Yarn, hizo hincapié en que «nos tomamos muy en serio» el calentamiento global.
El cantante cerró la larga presentación del exvicepresidente estadounidense Al Gore, creador de los conciertos para proteger al medio ambiente Live Earth.
Al Gore recordó en el Foro Económico de Davos, que comenzó este miércoles y finalizará el sábado, las escalofriantes cifras de polución y las consecuencias del calentamiento global, pero también consideró que existe la capacidad de «solucionar la crisis» medioambiental mundial.
Gore, vicepresidente estadounidense entre 1993 y 2001, dijo que Alemania generó el año pasado el 74 % de su electricidad con energía solar y eólica y que va a ser el primer país en ser neutral desde el punto de vista del carbono.
Señaló que se arrojan a la atmósfera cada veinticuatro horas 110 millones de toneladas de dióxido de carbono y apostó por la vigésimo primera Conferencia Internacional sobre Cambio Climático que se celebrará en diciembre de este año en París, organizada por Naciones Unidas.
En ella se tratará de lograr un acuerdo mundial para reducir las emisiones de gases contaminantes.
Al Gore enfatizó que el 2014 fue el año más caluroso en la Tierra.
Asimismo dijo que el calentamiento global tiene como consecuencia el aumento de la temperatura de los océanos y la evaporación del agua en la atmósfera, lo que ha incrementado las inundaciones y desprendimientos de tierra en algunas regiones del mundo, causando enormes daños humanos y económicos en países como India, Pakistán, Indonesia, Sri Lanka, entre otros.
El año pasado cayeron 61 centímetros de agua en 26 horas en Florida, según Al Gore.
En América Central cayeron 1,5 metros de agua de lluvia en diez días.
Al Gore también destacó el acuerdo al que llegaron EEUU y China el año pasado para reducir las emisiones contaminantes.