El presidente de EEUU, Barack Obama, confirmó este miércoles que ha llegado a un acuerdo para restablecer las relaciones diplomáticas con Cuba, rotas en 1961, y abrir embajadas en las respectivas capitales este mes.
«Este es un histórico paso adelante en nuestro esfuerzo para normalizar las relaciones con el Gobierno y el pueblo de Cuba», dijo Obama en una declaración a la prensa desde la Rosaleda de la Casa Blanca, la residencia presidencial en Washington.
El gobernante no precisó una fecha para la apertura de embajadas, a pesar de que el Gobierno cubano ya ha confirmado que la misión de Cuba en Washington se abrirá el próximo 20 de julio.
No obstante, anunció que el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, viajará a Cuba «este verano» para izar la bandera estadounidense en la nueva Embajada del país en La Habana.
«Nuestras naciones están separadas por solo 90 millas (145 kilómetros), y hay profundos lazos de amistad y familia entre nuestros pueblos», aseguró Obama.
El jefe del Estado de EEUU habló de su decisión de modificar la política estadounidense respecto a Cuba, anunciada el pasado 17 de diciembre, al indicar que «cuando algo no funciona, podemos cambiar, y cambiaremos».
Aseguró, además, que en los próximos meses Estados Unidos encontrará «nuevas maneras de cooperar con Cuba» en «asuntos de interés mutuo, como lucha contra el terrorismo, respuesta a desastres y desarrollo».
Obama reconoció que, «hace un año, podría haber parecido imposible» que Estados Unidos pudiera anunciar un acuerdo para restablecer las relaciones con Cuba, su enemigo histórico desde la Guerra Fría.
«Este es el rostro del cambio», afirmó Obama, quien recordó que en el año en que él nació, 1961, el entonces presidente estadounidense, Dwight Eisenhower (1953-1961), expresó su confianza en que la Embajada estadounidense que entonces se cerraba pudiera reabrirse «en un futuro no muy distante», y ese día por fin ha llegado.