El partido ultraderechista francés Frente Nacional (FN) decidió este jueves expulsar a su cofundador, Jean-Marie Le Pen, por sus declaraciones antisemitas y negacionistas.
La sanción fue adoptada por el Buró Ejecutivo del partido, que se reunió en Nanterre, a las afueras de París, en presencia del propio Le Pen, después de que este hubiera reiterado recientemente que las cámaras de gas de los campos de concentración nazis no son más que «un detalle» de la historia.
«La decisión completa y motivada será notificada próximamente al señor Le Pen», indicó la formación en un breve comunicado, en el que solo avanzó que esa medida alcanzó la «mayoría» necesaria para ser adoptada.
La dirección ya expulsó a Le Pen una primera vez en mayo, pero el veterano político recurrió a la Justicia y consiguió que se le restituyera la militancia y que se anulara el «congreso postal» en el que, a través del correo, se pidió a los militantes que se pronunciaran sobre la supresión de la figura del presidente de honor.
El patriarca del clan Le Pen, de 87 años, se defendió este jueves durante más de tres horas ante el órgano ejecutivo y a su salida afirmó haber expresado su deseo de que «este episodio un poco polémico sea una etapa hacia la reunificación activa del FN».
En la cita no estuvieron ni su hija Marine, actual presidenta del partido, ni su número dos, Florian Philippot, al considerar que la rivalidad personal con el fundador no les permite tener un juicio imparcial.
Pero la suerte parecía estar echada, porque la mayor parte de los miembros del Buró Ejecutivo son fieles de Marine, entre ellos su pareja sentimental, Louis Aliot.
El abogado del octogenario político, Fredéric Joachim, denunció en la cadena «BFM TV» que la decisión ya se había tomado con antelación y sostuvo que, a la espera de conocer los detalles de la expulsión, va a aconsejar a su cliente que vuelva a recurrir ante los tribunales esta nueva sentencia.