La bajeza humana parece no tener límites. Así lo ha constatado este martes una reportera húngara llamada Petra Laszlo que, entre la confusión de los refugiados por huir de la policía, ha aprovechado para agredir a varios de ellos, entre los que se incluyen niños.
Los hechos han ocurrido en localidad de Roeszke, cercana a la frontera con Serbia, donde la policía -sin poner mucho interés- intentaba controlar a un grupo de refugiados sirios que pretendían seguir su camino hacia Alemania. Las fuerzas de seguridad, más que retenerlos, intentaban guiarlos, un hecho que parece no haber gustado a la reportera.
Diversos vídeos grabados por otros periodistas muestran cómo la reportera agrede a diversos refugiados. En una toma se puede ver cómo zancadillea a un padre que carga con su hija provocando su caída. En otra se la ve dando patadas a un niño y una niña por el simple hecho de acercarse demasiado a ella.
Según informan diversos medios húngaros, la reportera y que trabajaba para la NT1, ha sido despedida, tal y como ha explicado un responsable de la cadena en Facebook.
El terrible momento ha sido captado y subido a Twitter por el periodista Stephan Richter.