La canciller alemana, Angela Merkel, recordó este sábado que el acuerdo entre la UE y Turquía para la devolución de solicitantes de asilo se basa en el respeto de las reglas del estado de derecho, por lo que se estudiará cada caso de forma individual antes de decidir la deportación de un refugiado.
En su mensaje de vídeo semanal, Merkel se refiere a las denuncias de las ONG que han abandonado su trabajo en Grecia en protesta por ese acuerdo y por la situación en los campos de detención establecidos en el país para gestionar las devoluciones.
La canciller subraya que la primera tarea de los países que comparten el espacio Schengen es proteger sus fronteras exteriores para acabar con la actividad de las mafias que trafican con personas, objetivo que persigue también, aseguró, proteger a los refugiados.
Sólo en este año han muerto en el Egeo 400 personas en manos de esos traficantes, y «por eso hemos firmado un acuerdo con Turquía», recalcó.
En la aplicación de ese acuerdo, añadió Merkel, no debe olvidarse el respeto a las reglas del estado de derecho, lo que significa que cada solicitante de asilo que llegue a Grecia tiene derecho a un proceso individual en el que se estudiará si procede su devolución a Turquía.
Por su parte, prosiguió, la Unión Europea (UE) asume «su responsabilidad humanitaria» y por cada sirio devuelto a Turquía acepta la llegada de otro desde ese país por una vía legal.
Merkel recordó además la disposición de algunos países europeos a aceptar contingentes de refugiados desde Turquía si se demuestra que este acuerdo funciona, es decir, si se frenan las llegadas irregulares de solicitantes de asilo.
El objetivo es que puedan acceder a Europa por «vías legales y no con malos chalecos salvavidas y botes hinchables en los que arriesgan sus vidas», insistió.
La canciller elogió el trabajo de las ONG y de los voluntarios implicados en la atención a los solicitantes de asilo, tras reunirse ayer en Berlín con varios de sus representantes.
Tras destacar en concreto el papel de Caritas, en cuyo congreso participará esta semana, Merkel admitió que el estado no puede delegar en las ONG sus responsabilidades y debe garantizar a los solicitantes de asilo los recursos necesarios, pero reconoció también la necesaria la contribución de los voluntarios.