El senador de Texas Ted Cruz, el rival de primarias de Donald Trump que más cerca estuvo de ganar al magnate, no ofreció este miércoles un apoyo expreso al candidato republicano a la Presidencia de EEUU y salió abucheado al final de su discurso en la Convención Nacional del partido en Cleveland (Ohio).
Cruz felicitó, no obstante, a Trump por ganar la nominación y dijo que espera que «los principios en los que cree nuestro partido se mantengan», pero en ningún momento respaldó expresamente al candidato, que logró este martes la nominación oficial como aspirante a la Casa Blanca.
Algunos delegados comenzaron a gritar «Dilo, dilo», en referencia al nombre de Trump, y terminó recibiendo una abucheo monumental en el pabellón Quicken Loans Arena, que acoge la convención, pese a haber sido recibido con una gran ovación.
Pese a no nombrar al magnate en su discurso, Cruz sí valoró algunas de sus propuestas, como la construcción de un muro en la frontera con México para frenar la inmigración ilegal o negar acogida a los refugiados sirios.
El senador se centró en pedir a los votantes que piensen en el futuro del partido.
Pese a decir que en las elecciones generales del 8 de noviembre se debe pone fin a una Presidencia demócrata y evitar que la virtual candidata de ese partido Hillary Clinton llegue a la Casa Blanca, no citó a Trump como la alternativa.
«A los que escuchan, no se queden en casa en noviembre. rebélense, hablen y voten lo que dicte su conciencia por candidatos en las papeletas a quienes confíen y defiendan la libertad y sean fieles a la Constitución», recomendó.
Cruz, cuyos delegados intentaron una rebelión en la convención para que se permitiera votar en conciencia y en línea con la disciplina del partido, se centró, así, en pedir el voto para las elecciones al Senado y la Cámara de Representantes que se celebran a la par que las presidenciales.
«Estamos peleando no por un candidato en particular o una campaña, sino para poder decirle a nuestros hijos que hicimos lo mejor por su futuro», aseguró el legislador.
«Hay una mejor visión para nuestro futuro: la vuelta a la libertad», apuntó Cruz, quien dijo que Clinton no cree en la libertad.
«Merecemos líderes que defiendan nuestros principios, que nos unan detrás de valores que compartimos, que dejen de lado el odio por el amor. Ese es el estándar que debemos esperar», zanjó Cruz, quien en ningún momento propuso a Trump como el embajador de esos valores.