Jason Haney es un albañil estadounidense que trabaja en una obra enfrente del Hospital Infantil South Bend, Indiana. El obrero decidió amenizar la estancia de los niños enfermos con la ayuda de su hija pequeña. Así pues, el operario y su hija construyeron un muñeco Wally de cartón de 2,5 metros de altura y apostaron por esconderlo, cada día en un sitio diferente, en el edificio en obras.
El albañil ha creado una página en Facebook para que los niños puedan avisarle cuando encuentran a Wally. En la red social, muchos padres de los niños hospitalizados agradecen a Haney su labor.
El obrero coloca a Wally en diferentes puntos del edificio: entre los muros de la nueva construcción, entre la grúa o en los andamios. Seguidamente, espera a que los niños lo encuentren y después cambia a Wally del lugar en el que lo había colocado.
Debido al éxito de su iniciativa, Jason Haney y su hija, están construyendo más estructuras, esta vez de personajes de la película Los Minions.