El presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, ha prometido tras la matanza perpetrada en la mezquita de Al Rawdah que responderá con "una fuerza brutal" a lo que se trata ya del atentado más sangriento de la historia reciente del país, con 235 muertos y más de 130 heridos.
"De este dolor extraeremos esperanza y determinación en la guerra contra este negro terrorismo", ha hecho saber el presidente en un comunicado publicado tras su reunión de emergencia con su cúpula de seguridad y recogido por el medio egipcio Al Ahram.
"Los responsables de este ataque vil y traicionero acabarán encontrando un castigo decisivo", ha añadido.
Al Sisi se dirigirá a la nación en breve para explicar sus planes de respuesta al ataque, y después de que fuentes de seguridad informaran de la muerte de 15 supuestos implicados en el ataque en un ataque de aviones no tripulados del Ejército egipcio.