Las autoridades estadounidenses han hallado los cadáveres de otras seis personas en California, lo que eleva a 48 el número de víctimas mortales por los incendios en el estado norteamericano, según ha recogido la cadena estadounidense NBC.
El sheriff del condado de Butte, Kory Honea, ha informado de que se han denunciado un total de 228 desapariciones de personas como consecuencia de los graves incendios que azotan California.
«Hasta ahora hemos localizado a 107 personas que estaban desaparecidas», ha explicado Honea en declaraciones a la prensa estadounidense. El sheriff ha subrayado que lo más probable es que la mayoría de los desaparecidos se encuentren a salvo tras huir de las llamas.
El Departamento del Sheriff ha puesto en marcha además varias líneas de atención telefónica para facilitar la localización de familiares y conocidos desaparecidos.
Mientras, los forenses trabajan en la identificación de los cadáveres localizados hasta el momento y dos equipos especializados en antropología colaboran para resolver los casos más complicados. Por ello no se descarta la utilización de pruebas de ADN.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el lunes el estado de desastre en California y ha ordenado ayuda federal para combatir los incendios forestales, los más destructivos de la historia del estado.
«Acabo de aprobar una solicitud acelerada para una declaración de desastre mayor para el estado de California. Quería responder rápidamente para aliviar algo del increíble sufrimiento que está ocurriendo. Estoy con ustedes», ha señalado el mandatario a través de su cuenta en la red social Twitter.
Según ha informado la Casa Blanca en un comunicado, la declaración pone fondos federales a disposición de las personas afectadas en los condados de Butte, Los Ángeles y Ventura.
«La asistencia puede incluir subvenciones para viviendas temporales y reparaciones de viviendas, préstamos a bajo coste para cubrir pérdidas de propiedad no aseguradas y otros programas para ayudar a individuos y dueños de negocios a recuperarse de los efectos del desastre», ha señalado la Casa Blanca.