Activistas ecologistas han derramado pintura de color naranja sobre la estatua 'Caballo y jinete', del artista estadounidense Charles Ray, y expuesta en las calles de la capital de Francia, París. Este acto se enmarca dentro de una aparente campaña de organizaciones en defensa del clima, que atacan reconocidas obras de arte para denunciar el cambio climático y la inacción de los gobiernos. Los activistas, miembros del grupo Última Renovación, ha puesto también una camiseta blanca al jinete de la estatua en la que se podía leer el lema 'Nos quedan 858 días', en una clara referencia al periodo del que se dispone para evitar para evitar una catástrofe climática. «Las conferencias climáticas no nos van a salvar, todo el mundo lo sabe. La resistencia civil es nuestra única esperanza (...) Por favor, actúa, reacciona», ha trasladado desde el movimiento Última Renovación. Por su parte, la ministra de Cultura de Francia, Rima Abdul Malak, ha denunciado que «el vandalismo ecologista ha subido de nivel» tras el ataque a la escultura de Ray. «Gracias a los restauradores, que intervinieron rápidamente», ha manifestado en Twitter.
Charles Ray es uno de los escultores estadounidenses más destacados y, desde principios de año, su estatua se encuentra frente al Museo Pinault, en la antigua Bolsa Mercantil del centro de la capital gala. Activistas ecologistas han llevado a cabo en los últimos meses acciones similares en museos de todo el mundo, incluido en Madrid, donde se atacaron los cuadros de 'La maja desnuda' y 'La maja vestida', obras de Francisco de Goya. Otras de las obras objeto de ataques han sido 'Los Girasoles', de Vincent van Gogh; 'El Grito', de Edvard Munch, o 'Muerte y Vida', de Gustav Klimt. Este mismo viernes se han lanzado ocho kilos de harina sobre un coche diseñado por Andy Warhol en una exposición de Milán.