Tres niños murieron este jueves en un tiroteo en el municipio estadounidense de Monroe (Ohio), en el que también resultó herida la madre de los menores.
El padre, de 32 años, fue arrestado sin incidentes tras llegar la policía a la residencia de la familia. Las autoridades no buscan a otros sospechosos, según la cadena local Fox 19.
Los tres fallecidos tenían 3, 4 y 7 años de edad, respectivamente. Su madre, de 34 años, está siendo tratada en un hospital por una herida de bala en la mano.
Según medios locales, una mujer llamó a la policía poco después de las 16.00 hora local (20.00 GMT) diciendo que habían «disparado a sus bebés».
Los agentes encontraron a los tres niños fallecidos con heridas de bala en el jardín. La investigación continúa abierta, según recoge Efe.