El barco portacontenedores que se estrelló este martes contra un puente de Baltimore avisó poco antes del impacto de que sufría problemas técnicos, una señal de alerta que permitió a las autoridades de la zona cortar el tráfico de coches sobre el río y que sólo hubiese ocho vehículos sobre la estructura cuando ésta se vino abajo.
El barco 'Dali' comenzó a virar a la 1.26 (hora local) de este martes, dos minutos antes de que se produjese el impacto contra el pilar que a la postre tiraría abajo todo el puente, según los datos verificados por la cadena CNN. Las autoridades han descartado cualquier otra hipótesis que no sea la del accidente, incluido el terrorismo.
El gobernador de Maryland, Wes Moore, ha explicado ante los medios que la tripulación emitió un 'mayday' antes de colisionar contra el puente Francis Scott Key, que terminó cayendo sobre el río Patapsco. Las autoridades llegaron a cortar el tráfico, lo que no impidió que varios vehículos se vieran afectados.
La Autoridad Marítima y Portuaria de Singapur, país bajo cuya bandera navegaba el 'Dali', ha asegurado en un comunicado que la compañía Synergie Marine les trasladó que, antes del impacto, el barco "había sufrido una pérdida momentánea de la propulsión", tesis que encaja con la versión facilitada por las autoridades estadounidense.
"Como resultado (de estos problemas), no pudo mantener el rumbo deseado y colisionó contra el puente Francis Scott Key", ha explicado la agencia singapurense, que ha indicado además que el 'Dali' pudo soltar el ancla antes del choque final.
OCHO PERSONAS DESAPARECIDAS
El secretario de Transporte de Maryland, Paul Wiedefeld, ha confirmado que sobre la estructura había en el momento del derrumbe ocho personas. Dos de ellas han sido localizadas con vida en el río por los servicios de emergencia, mientras que prosigue la búsqueda de otras seis que permanecen desaparecidas.
Sobre el estado del puente, el gobernador ha dejado claro que no presentaba ninguna deficiencia conocida ni problemas estructurales, dando a entender que simplemente no pudo soportar el impacto del buque, de 300 metros de eslora y con capacidad para hasta 10.000 contenedores.
Las autoridades locales también han aclarado que el barco estaba siendo pilotado en el momento del siniestro por un experto local y no por personal de la tripulación, una táctica habitual en Baltimore para evitar precisamente accidentes en la entrada o la salida del puerto.