La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aclaró hoy que el recorte salarial del 5% anunciado para los empleados públicos no afectará a los trabajadores del sector empresarial estatal al estar sujetos al ámbito de la negociación colectiva, lo que «hay que respetar».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, De la Vega explicó que dentro de las empresas de titularidad estatal el recorte sólo se aplicará a los directivos, en tanto que para el resto de trabajadores habrá que ceñirse a la negociación colectiva.
También se verán afectados por la rebaja salarial «todos los empleados públicos: funcionarios, estatutarios y laborales», que dependan de las diferentes administraciones públicas (central, autonómica y local).
De la Vega contestó a una pregunta sobre este aspecto del recorte salarial, después de las aclaraciones reclamadas hoy públicamente desde los sindicatos, que también pidieron que se detalle cuanto antes la rebaja exacta para cada tramo salarial para acabar con la incertidumbre de un colectivo de más de 2,5 millones de personas.
En este sentido, la vicepresidenta reconoció que las medidas de ajuste son «duras, difíciles y especialmente dolorosas», y aseguró que al Gobierno también «le duele y le afecta» tomarlas, pero es consciente de que tiene que hacerlo para «formar el modelo de sociedad que defiende y en el que cree».
«Que nadie dude de que el compromiso social del Gobierno sigue siendo el mismo», dijo, y añadió que si se han tomado medidas «excepcionales» es para responder a una situación excepcional, pero no significa que el Ejecutivo esté renunciando a los principios que han guiado su acción política, entre los que citó la extensión de derechos a todos los ciudadanos.
Asimismo, reconoció las diferencias existentes con los sindicatos en torno a las medidas para recortar el déficit público, pero se mostró convencida de que el objetivo de todos es el mismo, «asegurar el bienestar presente y futuro de los españoles».
Agradeció a los sindicatos la responsabilidad con la que han venido actuando en los últimos dos años y que se mantengan en el diálogo social a pesar del disenso, y mostró su deseo de que los próximos días se pueda llegar a un acuerdo en torno a la reforma laboral.
También confía en conseguir el apoyo parlamentario suficiente para sacar adelante las medidas de austeridad anunciadas el miércoles por el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Congreso de los Diputados.