El 18,9% de las chicas y el 31,9% de los chicos adolescentes justifican la violencia y el sexismo como reacción a una agresión y tienen «una preocupante tolerancia hacia el maltrato», según un estudio elaborado por la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, del que se desprende que más del 13% de los varones jóvenes dice haberla ejercido y un 9% de las mujeres haberla padecido.
El estudio, presentado por el delegado del Gobierno en la materia, Miguel Lorente, y realizado en colaboración con el Ministerio de Educación, se ha realizado en 335 centros educativos con una población total de 11.020 estudiantes.
Categorías
Los resultados dividen a los adolescentes en tres grupos en función de su exposición a conductas violentas y su nivel de justificación de las mismas. Así, el 76,1% de las adolescentes rechazan estas conductas, frente a un 18,9% que las justifica «en cierta medida» y «como reacción a una agresión» con una «preocupante tolerancia hacia el maltrato».
Además, hay un tercer grupo, formado por el 4,96% de las adolescentes, las que han vivido «en carne propia» situaciones de maltrato en la pareja «con cierta frecuencia» aunque no la justifican más que el resto.
En cuanto a los chicos, el 65% «rechazan de forma generalizada» el sexismo y la violencia, mientras que un 32,1% la «justifican en cierta medida» y el 3,21 por ciento «reconoce haber ejercido situaciones de maltrato en la pareja con frecuencia» y tienen una justificación de la misma «bastante más elevada» que entre el resto.
Según los datos, las situaciones de maltrato más frecuentes son «las de control abusivo y aislamiento, seguidas de otras formas de abuso emocional, a través de las que suele iniciarse la violencia de género».
En este sentido, un 9,2% de las chicas encuestadas dijo haber vivido situaciones de maltrato por parte de chicos con los que estaban saliendo, habían salido o querían salir, con actitudes como «intentar controlar hasta el más mínimo detalle», lo que había padecido un 6,98%, «intentar aislarla de sus amistades» (6,09%) o «hacerla sentir miedo» (2,71%). Además, el 1,01% dijo haberse sentido obligada a practicar conductas de tipo sexual en las que «no quería participar».
En cuanto a los chicos, un 13,1% reconoce haber ejercido este tipo de conductas, que en un 2,7% tienen que ver con intentar «controlar hasta el más mínimo detalle», en el 1,97%, tratar de «aislarla de amistades» y, en un 1,3%, «presionar» a la chica para que realizase conductas de tipo sexual que ella rechazaba.
Pues esto es lo que tenemos, esto es lo que habeis conseguido en todos estos años. Primero con el "pontelo, ponselo", despues mediante decretos y leyes hechas con los pies, rebajando a la minima expresion la autoridad de los padres y de los maestros, luego poniendo de ministra a una desgraciada apadrinada por Chavez, que todo lo que le preocupa es encontrarse el clitoris y contabilizar las que denuncian y las que no denuncian, y ahora aprobando una ley de aborto en la que los padres no tienen ni que opinar. ¿Que quereis? Estamos criando cuervos.