El Gobierno y los agentes sociales quieren que los grupos políticos se unan a la negociación que mantienen desde hace una semana en aras de alcanzar un pacto global en distintas materias sociolaborales más allá de la reforma de las pensiones.
Tras la primera reunión oficial de ámbito tripartito -Gobierno, patronal y sindicatos- que se celebró ayer, todas las partes han puesto de manifiesto su voluntad de conseguir el entendimiento a pesar de las dificultades de la negociación.
Fuentes conocedoras de estos encuentros señalaron que todavía persisten las discrepancias pero que, pese a las diferencias, en la reunión hubo «buen ambiente» porque todos desean llegar a un acuerdo, conscientes de que las tres partes tendrán que ceder.
Mutis
Otras fuentes consultadas, que han preferido no informar de los detalles que hoy se han debatido en la reunión para no interferir en las negociaciones, han considerado que el hecho de que todas las partes quieran continuar es una buena señal.
A la cita de ayer asistieron por primera vez el nuevo presidente de la CEOE, Juan Rosell, ya que hasta ahora sólo se habían reunido el ministro de Trabajo e Inmigración Valeriano Gómez, y los secretarios generales de CCOO Ignacio Fernández Toxo, y de UGT Cándido Méndez.
Además, se incorporó el vicepresidente primero del Gobierno Alfredo Pérez Rubalcaba, quien decidió participar para aportar una valoración más amplia sobre todos los temas que se tratan en la mesa de negociación, ya que la idea, según explicó, es extender el diálogo a todos los grupos políticos.
De hecho, el Ejecutivo ya ha comenzado a hablar con los partidos, según Rubalcaba, quien expresó ayer que un consenso amplio daría más confianza a la economía española.
Además de la reforma de las pensiones, los interlocutores han abordado cuestiones relativas a la reforma laboral, las políticas activas de empleo y la negociación colectiva.