Los problemas fiscales en EEUU, la crisis de la deuda europea y la incertidumbre sobre las reformas en España se conjugaron para arrastrar a la baja a la Bolsa española, que perdió por primera vez desde septiembre los 8.000 puntos.
El selectivo Ibex-35 -el principal indicador de la Bolsa española- se colocó ayer en los 7.904,90 puntos, tras bajar un 1,45%. En lo que va de año cae casi un 20%.
Más retrocesos
El resto de las plazas europeas sufrieron también retrocesos, influidas por el descenso de Wall Street en la apertura, de manera que Londres se dejó un 0,30%, París un 0,84%, Fráncfort en torno a un 1,22% y Milán un 1,54%.
Detrás de estos descensos se encuentra, como en días anteriores, la falta de una salida a la crisis de la deuda soberana europea, que está golpeando con especial virulencia a España.
Ayer, la prima de riesgo se colocaba, poco antes del cierre, cerca de los 470 puntos básicos, frente a los 464 puntos del martes. La cotización del euro frente al dólar se colocó de nuevo por encima de las 1,35 unidades.
Pero ayer se unió además otro factor. En Estados Unidos prosigue la falta de acuerdo en el Congreso para alcanzar un pacto que permita reducir el déficit.