El presidente del grupo parlamentario socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo hoy que las medidas de ajuste aprobadas por el Gobierno son injustas, porque recaen en su mayoría sobre rentas medias y bajas, jóvenes y pensionistas, y advirtió de que conducirán a una «grave depresión económica».
En rueda de prensa, Pérez Rubalcaba criticó que el Ejecutivo utilice la excusa del déficit de las comunidades autónomas para tocar las cuentas del Estado que, desde hace dos años, se sabía que había que ajustar en 16.500 millones de euros en 2012.
En su opinión, el PP intenta dar «gato por liebre» mediante ese «truco contable» con el objetivo de no reconocer que durante la campaña electoral mintió al decir que no subiría los impuestos.
Aseguró que la subida del IRPF llevará a un menor consumo y, por tanto, a una mayor destrucción de empleo, y subrayó que los ajustes, al no ir acompañados de medidas para incentivar la economía, «nos llevarán a una grave depresión económica».
Tras reunirse con los expertos socialistas en materia económica, avanzó que su grupo votará en contra de los ajustes e insistió en la necesidad de ralentizar la senda de consolidación fiscal comprometida con Europa para que ésta no afecte al crecimiento ni al empleo.
Apuntó que las medidas planteadas por el Gobierno revelan que quieren poner encima de la mesa un modelo productivo basado en «trabajar más y cobrar menos» y en la vivienda, en vez de en la educación y en la investigación, que son el futuro.
Rubalcaba pidió al Ejecutivo que explique a qué administraciones se les «ha ido de la mano el déficit», si a las comunidades autónomas, a los ayuntamientos o al Estado, para determinar quiénes son los responsables de que el déficit vaya a ser del 8 % en lugar del 6 %.
Afirmó que si la culpa es de autonomías y ayuntamientos -que recordó que en su mayoría están gobernadas por el PP-, los ajustes deberían hacerlos ellos y no el Estado, como plantea el Gobierno.
«No es razonable que los gastos en Valencia para la Fórmula 1 los paguen indirectamente la educación y la investigación», aseveró Pérez Rubalcaba, quien acusó al PP de usar el déficit en el conjunto de las Administraciones Públicas para subir los impuestos, cuando durante la campaña negó que lo fuera a hacer a pesar de que sabía que en 2012 el Estado debía ajustar sus cuentas en 16.500 millones.
Explicó que las medidas aprobadas ayer supondrán recortar en 9.000 millones el gasto del Estado y aumentar en 6.000 millones los ingresos, de los que mil millones se los llevarán los ayuntamientos, 2.500 las autonomías -cuando su déficit es de 10.000 millones- y 2.500 el Estado.
Esto supone que aún quedarán por ajustar 5.000 millones de euros en las cuentas del Estado, por lo que no descartó que el Gobierno incremente el IVA en el futuro.
Destacó que la congelación del salario mínimo y la supresión de la renta de emancipación son un claro ataque a los jóvenes, y calificó de «mala ocurrencia» la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
En cuanto a la subida del IRPF, dijo que ni es justa ni razonablemente económica porque dos tercios del ajuste lo pagarán los trabajadores por cuenta ajena, mientras que las rentas del capital sólo cargarán con un tercio.
«Tampoco nos parece razonable que los que ganan menos de 53.000 euros al año paguen el 70 % del ajuste del IRPF», afirmó Rubalcaba, que insistió en subir los impuestos a las grandes fortunas y a las grandes corporaciones, ya que en España hay empresas que pagan menos de un 10 % por el Impuesto de Sociedades gracias a las deducciones.
Además, criticó que a los pensionistas, mientras con una mano se les sube la pensión un 1 %, con la otra se les aumenta los impuestos un 0,75 %.
Pérez Rubalcaba pidió al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que comparezca en el Parlamento para explicar los ajustes.