La capital del Principado de Asturias ha celebrado este viernes la trigésimo segunda ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias, la primera de Javier Fernández como presidente autonómico, en la que se ha apelado a valores como la solidaridad, el compañerismo y la justicia social.
Uno de los momentos más emotivos de la gala ha sido el abrazo entre los futbolistas Iker Casillas y Xavi Hernández, galardonados por segunda vez con el Premios Príncipe de Asturias de los Deportes, que el público del Teatro Campoamor acogió con una sentida ovación.
Especial significado tuvo también la participación del embajador de Estados Unidos en España, Alan Solomont, quien leyó un mensaje del escritor Philip Roth, que no ha podido viajar hasta Oviedo a recoger su premio por continuar convaleciente de una operación de columna.
El inicio y el término de la cita han estado marcados este año por una amplia concentración contra los recortes en la Plaza de la Escandalera, en las inmediaciones del Teatro Campoamor que, entre banderas republicanas, se mezcló con quienes se acercaron para ver de primera mano a los protagonistas de esta edición.
A la llegada, junto con Iker Casillas y Xavi Hernández, uno de los premiados más aplaudidos fue el diseñador de videojuegos Shigeru Miyamoto, reconocido en la categoría de Comunicación y Humanidades.
Los Príncipes y la Reina fueron los últimos en entrar en el Campoamor, don Felipe con traje oscuro y corbata azul; doña Letizia, peinada con ondas al agua, con un conjunto de falda blanca y blusa negra con brillos y transparencias; y doña Sofía con traje de chaqueta y falda en tonos morados.
La gala, que contó con la presencia del ministro de Educación, José Ignacio Wert, comenzó con las palabras el presidente de la Fundación Príncipe de Asturias, Matías Rodríguez Inciarte.
Tras él, este año abrió el turno de discursos la filósofa Martha C. Nussbaum, reconocida con el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, quien se mostró critica con la economía que sólo tiene en cuenta el crecimiento y no la igualdad o la redistribución.
Por su parte, Rafael Moneo, galardonado en la categoría de Artes, ha celebrado poder mirar el mundo «con los ojos del arquitecto» y ha querido hacer extensible el reconocimiento con su familia, colegas y estudiantes.
También han compartido el galardón de Cooperación Internacional el presidente de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, Tadateru Konoé, y el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, Peter Maurer, quienes han hecho mención especial los voluntarios fallecidos, cuya entrega «jamás será olvidada».
Discurso del Príncipe
En uno sus discursos más destacados del año, su Alteza Real el Príncipe Felipe ha pedido superar las diferencias entre los españoles «en el marco de nuestro Estado de Derecho que tantos sacrificios nos ha costado alcanzar». «Desde el año 1978 millones de españoles hemos sido educados en libertad y democracia y hemos aprendido a expresar nuestras opiniones y a escuchar y valorar ideas distintas a las nuestras dentro de ese marco», ha añadido.
El Príncipe de Asturias ha asegurado que los grandes desafíos que tiene la España del siglo XXI sólo se podrán superar «si todos los españoles colaboramos y caminamos en la misma dirección» y ha señalado que las diferencias se deben de resolver «respetando las leyes en el marco de nuestro Estado de Derecho, que tantos sacrificios nos costado alcanzar».
Asimismo, durante su intervención ha elogiado la labor del arquitecto Rafael Moneo (Artes); la filósofa Martha C. Nussbaum (Ciencias Sociales); el diseñador y productor de videojuegos Shigeru Miyamoto (Comunicación y Humanidades); los investigadores Gregory Winter y Richard A. Lerner (Investigación Científica y Técnica); el escritor Philip Roth (Letras); el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (Cooperación Internacional); los futbolistas Iker Casillas y Xavi Hernández (Deportes); y la Federación Española de Bancos de Alimentos (Concordia).
Además, como ya es costumbre, acompañado por doña Letizia, el inspirador de los galardones clausuró el acto y convocó la edición de 2013 de los Premios Príncipe de Asturias.
Al término de la ceremonia, tras el himno de Asturias y ya de noche, los galardonados abandonaron el teatro en comitiva hacia el Hotel de la Reconquista junto a centenares de personas, integrantes de bandas de gaitas y de grupos folclóricos del Principado.