La economía española seguirá sufriendo en 2013, con una contracción similar a la de este año (1,4 %), según las previsiones anunciadas ayer por la Comisión Europea (CE), que considera que, si no hay cambios, el Estado incumplirá sus objetivos de reducción del déficit.
Según Bruselas, el déficit público español alcanzará este año el 8 % del Producto Interior Bruto (un punto menos si se descuentan las ayudas a la banca), bajará al 6 % en 2013 y repuntará al 6,4 % en 2014.
Esas estimaciones, advirtió ayer el vicepresidente económico de la CE, Olli Rehn, «se sitúan muy por encima de los objetivos fijados para ese año», momento en el que España debería rebajar su déficit al 2,8 % para cumplir con los compromisos pactados con sus socios europeos.
Medidas fiscales
Por ello, Rehn alentó a Madrid a «concretar pronto las medidas fiscales» para 2014, aunque no adelantó si Bruselas pedirá nuevos esfuerzos o si optará por dar más tiempo al saneamiento de las cuentas públicas.
Por lo pronto, Bruselas ya apunta en su informe a que el repunte del déficit en 2014 vendría motivado principalmente por el fin de algunas medidas puestas en marcha en 2012, como la subida del IRPF.
Respecto a este año y el próximo, cuando las metas de déficit son del 6,3 % y del 4,5 %, respectivamente, Rehn explicó que determinará «pronto» si el Estado ha tomado pasos efectivos para reducir el desajuste.
Las estimaciones de crecimiento para el año próximo empeoran las que el propio Ejecutivo comunitario publicó el pasado mes de mayo -cuando preveía un caída del PIB de sólo el 0,3 %- y las de las autoridades de Madrid, que esperan una contracción del 0,5 %.
Bruselas considera que en el ámbito del empleo lo peor aún está por llegar y cree que el paro seguirá subiendo en España, hasta un 25,1 % este año y hasta el 26,6 % el próximo, para comenzar a reducirse ligeramente en 2014.