El Parlamento catalán ha aprobó ayer por una amplia mayoría, más de dos tercios de la cámara, una resolución en la que se insta al Govern de la Generalitat a «iniciar un diálogo» con el Gobierno del Estado para celebrar una consulta de autodeterminación en Catalunya.
La resolución fue presentada por el PSC, una iniciativa similar a la que avaló en el Congreso y que produjo que por primera vez votase diferente que el PSOE, y superó ayer en consenso a la declaración soberanista aprobada en el Parlament por CiU, ERC e ICV-EUiA, recurrida por el Gobierno ante el Tribunal Constitucional.
La declaración soberanista, que catalogaba a Catalunya de «sujeto jurídico y político soberano», contó entonces con el apoyo del 63 % de diputados de la cámara catalana.
La resolución de ayer, que pone el acento en el «diálogo» con el Estado, fue apoyada por 104 diputados de CiU, ERC, ICV-EUiA y PSC -el 77 % de los 135 diputados- y contó con el rechazo de 27 diputados del PPC y Ciutadans. Los tres diputados de la CUP se abstuvieron.
La propuesta de resolución aprobada ayer, y que fue rechazada en el Congreso pese al apoyo de los partidos catalanes, dice lo siguiente: «El Parlament de Catalunya insta al Govern de la Generalitat a iniciar un diálogo con el Gobierno del Estado, para posibilitar la celebración de una consulta a la ciudadanía catalana para decidir sobre su futuro».
El consenso parlamentario tuvo, no obstante, un contrapunto: la ausencia del presidente catalán, Artur Mas, en el debate, puesto que sólo acudió al final para ejercer su derecho a voto, lo que fue recriminado por los socialistas en un pleno menos solemne que el que alumbró la declaración soberanista.
El líder del PSC, Pere Navarro, condicionó su apoyo a la consulta a que la Generalitat la pacte no sólo con el Gobierno sino que el «diálogo» se amplíe al resto de presidentes autonómicos y a los líderes de todos los partidos políticos españoles.