El PSOE y el PSC aparcaron ayer la revisión de sus relaciones y pactaron crear un comité permanente de coordinación política, encargado de hacer un seguimiento del día a día y de la gestión política cotidiana para mejorar la cooperación entre ambos partidos en el ámbito orgánico y parlamentario.
Esta figura se aprobó por unanimidad en el Comité Federal del PSOE, donde finalmente no se estudió la revisión del protocolo de relaciones, que había molestado a muchos «barones» del partido porque admitía la posibilidad de que los socialistas catalanes votaran diferente en el Congreso en asuntos de especial relevancia para Catalunya.
Según fuentes socialistas, con esta propuesta se da el visto bueno también al regreso a la dirección del grupo parlamentario de un representante del PSC, después de que el diputado José Zaragoza se viera forzado a abandonarla hace unos meses, cuando los socialistas catalanes rompieron la disciplina de voto para respaldar el derecho a decidir.
El Comité Federal del PSOE no abordó finalmente el nuevo protocolo de relaciones, ante el rechazo que había despertado en varias federaciones socialistas la posibilidad de dejar que el PSC tuviera libertad de voto en el Congreso, y se limitó a dar el visto bueno a una especie de comité de enlace entre los dos partidos y dentro del grupo parlamentario.
Flecos pendientes
Según las fuentes, en las últimas horas las dos partes constataron la dificultad de cerrar los flecos pendientes de la revisión del protocolo y llegaron a la conclusión de que era mejor ampliar el ámbito de acción del comité que ya habían pactado y no limitarlo sólo al ámbito parlamentario, sino a toda la acción política.
De acuerdo con las fuentes, con la decisión de ayer no se da libertad de voto al PSC en temas en los que haya discrepancias, como habían pedido los socialistas catalanes, sino que las diferencias se tratarán de resolver con diálogo acercando posturas.
Las fuentes recordaron que las discrepancias a día de hoy «son menores» y que, de haberlas, ahora tienen un espacio estable para debatirlas.
«No hay ni concesiones ni cesiones. Es un acuerdo entre dos partes, unos partidos que comparten un ideario y el fin de su acción política», subrayaron fuentes del PSC.