Un hombre ha empotrado a primeras horas de la mañana de este viernes un coche cargado con bombonas de gas butano en la sede nacional del PP, en la calle de Génova de Madrid, y al ser detenido ha declarado a la Policía Nacional que había cometido la acción porque está arruinado.
La Policía encontró en el vehículo dos bombonas y varios kilos de nitrato amónico, así como un temporizador y un iniciador de carácter casero, según fuentes de la investigación.
El arrestado, identificado como Daniel Pérez B., de 37 años y natural de Bronchales (Teruel), ha declarado a los agentes que era empresario y que estaba desesperado tras haberlo perdido todo.
Fuentes policiales han precisado que se trata de una persona en paro desde el pasado mes de mayo, que había trabajado en periodos interrumpidos en una fábrica de aglomerados de madera de Teruel, que padece esquizofrenia y problemas con las drogas y que fue detenido en 1999 por el hurto de un vehículo.
El suceso ha ocurrido en torno a las siete de la mañana cuando el hombre consiguió meter el coche, un Citroen Xantia, en la entrada de la sede del PP.
Técnicos especialistas en desactivación de explosivos (Tedax) han encontrado en el interior del vehículo dos bombonas de gas butano y varios sacos que contenían abono industrial.
El coche ha llegado «hasta las escaleras» que conducen a la sala de prensa y que casi atropella a una empleada de limpieza porque circulaba a una velocidad «increíble», según ha relatado tras el suceso la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, en declaraciones a Esradio.
Dos limpiadoras que trabajan en la sede del PP han sido testigos del momento en el que el coche se ha empotrado en el edificio, lo que ha producido un estruendo «muy grande» y casi atropella a una de ellas.
Nada más producirse el suceso la Policía Nacional ha desalojado la zona, ha establecido un amplio cordón y ha desplazado varias unidades de intervención, además de los Tedax, al lugar, donde también se han personado efectivos de bomberos y donde sobrevolaban varios helicópteros.
Además, por motivos de seguridad y a petición de la Policía Nacional fue interrumpido desde las 07:22 horas el servicio de Metro en la línea 4 entre las estaciones de Goya y San Bernardo, y los trenes no paraban en la de Alonso Martínez de las líneas 5 y 10.
Asimismo, fueron cortados todos los accesos a la calle de Génova tanto al tráfico como a los peatones, lo que ha provocado un colapso de circulación.
La circulación por la zona se restableció en torno a la una menos cuarto de la tarde después de que a las doce y media fueran retirados el coche y el cordón policial.
Miriam Juárez, una mujer que se encontraba en la estación de metro de Alonso Martínez narraba cómo un miembro de seguridad de la Empresa Municipal de Transportes había dicho a los viajeros que salieran «rapidito» a la calle y que les habían desalojado por una salida que da a la calle de Almagro.
El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha explicado que, aunque los especialistas de Científica serán los que determinen qué contenía el vehículo, parece que era una mezcla de gasolina con fertilizante y que los Tedax han determinado que hubiera sido difícil que el artefacto explosionara ya que era rudimentario y ha sido de inmediato desactivado.
Según han relatado vecinos de su pueblo, Bronchales (Teruel), que han dicho estar en estado de shock, Daniel Pérez es una persona en paro, poco habladora, de rutinas diarias, que toma café en el bar y que se va a cortar leña al monte.
El alcalde de Bronchales, Francisco Nacher, ha explicado a Efe que el detenido está soltero y procede de una familia «absolutamente normal» que no aparentaba tener «graves problemas económicos», aunque él sí «llevaba unos años en el paro».
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha llegado al lugar a las una y diez de la tarde para comprobar personalmente los daños ocasionados junto con la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y el vicesecretario de Organización del partido, Carlos Floriano.
María Dolores de Cospedal envió tras el suceso un mensaje de «tranquilidad y sosiego» y agradeció la «rápida y eficaz respuesta» de la Policía Nacional.
Por su parte, el PSOE ha condenado este «acto violento» y ha expresado su deseo de que este tipo de ataques «no se vuelvan a repetir».