Un toro adelantado de la manada ha creado numerosas ocasiones de peligro en el tercer encierro de los sanfermines de este año, que ha durado dos minutos y veintitrés segundos y que se ha saldado con, al menos, dos heridos por traumatismos.
La manada, de la ganadería madrileña Victoriano del Río, ha hecho un primer amago de no salir de los corrales tras el lanzamiento del cohete que marca el inicio de la carrera, pero luego ha subido al galope la cuesta de Santo Domingo, donde se ha adelantado ya uno de los astados.
A partir de aquí se han sucedido los momentos de peligro, tanto en la calle Mercaderes, donde el morlaco que iba en cabeza se ha caído, como más tarde en la calle Estafeta, donde otro de sus hermanos se ha adelantado para completar en solitario el resto del recorrido.
Me dan asco por las borracheras, por la ordinariez masificada, por maltrato de los animales, por la suciedad, por la ikurrña en Pamplona, por cobardía ante terroristas, de mucho correr delante del toro o delante del malvado separatista o terrorista. Señores, ni la Iglesia se apunta a esto, todo este alboroto no creo que sea cuerdo o sano. Vivan los pamplonicas de verdad es decir la mayoría, vivan los que corren limpios delante los toros los corredores de verdad, cero pelotero a los borrachos y pendencieros y cero peloteros a los intrusos radicales.