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Catalunya tras el 27S

El Consejo de Ministros aprobará el miércoles el recurso de inconstitucionalidad

| Béjar |

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado este lunes que el próximo miércoles reunirá al Consejo de Ministros para aprobar el recurso de inconstitucionalidad que presentará inmediatamente ante el Tribunal Constitucional para dejar sin efecto la resolución de ruptura con España aprobada este lunes por el Parlamento catalán con los votos de JxSí y CUP.

Rajoy ha explicado, durante una rueda de prensa en el ayuntamiento de Béjar (Salamanca) donde se encuentra este lunes de visita, que allí mismo, en el Consistorio salmantino, ha firmado la solicitud de dictámen al Consejo de Estado al que ha pedido que éste se emita en el plazo de 24 horas.

Una vez que este dictámen sea notificado, este martes se reunirá la Comisión de Secretarios de Estado y Subsecretarios, que elevará propuesta de recurso al Gobierno. Y el miércoles por la mañana tendrá lugar la reunión del Consejo de Ministros con el fin de aprobar la presentación del recurso de inconstitucionalidad ante el TC y con ella, el presidente, ha dicho, solicitará «por ser una prerrogativa del Gobierno», la «inmediata suspensión» de esta iniciativa y «de todos sus posibles efectos».

Además, Rajoy ha dejado claro que pedirá al Constitucional que la suspensión de la declaración del Parlamento catalán, en caso de ser acordada, sea comunicada «expresamente» a la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, «para que tenga en cuenta que la iniciatia recurrida no tiene ningún valor y no puede tener ninguna consecuencia».

«Vamos todos juntos porque España es cosa de todos»

El jefe del Ejecutivo ha asegurado que ha comunicado su decisión al líder del principal partido de la oposición, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con quien además se reunirá este martes en la Moncloa. Junto con esto, el Gobierno informará al resto de las formaciones políticas tal y como se comprometió él en la ronda de contactos con partidos y agentes sociales que concluyó la semana pasada con el encuentro con patronal y sindicatos. «Aquí vamos juntos todos porque España es cosa de todos, pensemos como pensemos», remachó.

El presidente quiso agradecer el «apoyo y respaldo» recibido en los últimos días por los dirigentes políticos y los agentes sociales. Se trata, dijo, de un «apoyo» que se produce a la democracia española y un «respaldo mayoritario que es a la unidad de España».

Rajoy confrontó la «unidad» que hay en la sociedad española para recurrir esta decisión del Parlamento catalán con la «división e incertidumbre» que han provocado las «pretensiones soberanistas» en la sociedad catalana.

«Tengo la convicción de que la mayoría de la sociedad quiere que se defienda la unidad de la nación española desde la unidad de las fuerzas políticas y tengo la seguridad de que los españoles exigen que prevalezca la igualdad y la ley frente a los que quieren imponer su voluntad por encima de las reglas democráticas y el sentir mayoritario de la sociedad», argumentó.

Y con esta seguridad como aval, explicó que su Gobierno no va a permitir que «continúe» que el camino emprendido por los independentistas en Catalunya: «Lo he dicho siempre y lo repito hoy, estamos dispuestos a utilizar todos los medios que el Estado de Derecho ha puesto a favor de la democracia para defender la propia democracia».

El recurso, el primer paso y le gustaría que fuera el último

Rajoy dejó claro que el Gobierno utilizará «sólo el Estado de Derecho, pero todo el Estado de Derecho; sólo la Ley, pero toda la Ley; sólo la democracia, pero toda la fuerza de la democracia», aseveró.

En este sentido, precisó que éste (en referencia la recurso ante el TC) es el «primer paso». Al presidente le gustaría que fuera «el último» pero señaló que no depende de quienes defienden la «convivencia», sino del «inútil empeño de aquellos que la están atacando».

En este punto, expuso que esta convivencia ha dado a los españoles el periodo más largo de «libertad y de prosperidad, el periodo más fructífero como nación y los mejores años de la historia de España».

Y también dijo «entender» el «hartazgo y la indignación» que provoca en tantos españoles este «continuo intento de deslegitimar nuestras instituciones y nuestra vida en común». «Entiendo -añadió- la zozobra que hoy pueden sentir tantos catalanes ante una iniciativa que no sólo desprecia la legalidad, sino la propia pluralidad de la sociedad catalana».

Mensaje de tranquilidad: Catalunya no se va a desconectar

Por ello, se dirigió a los catalanes para enviarles un mensaje de tranquilidad y les pidió que confíen en sus instituciones: «ni Catalunya se va a desconectar de ningún sitio, ni se va a producir ninguna fractura, nadie tendrá que escoger ni renunciar a su identidad española y europea, nadie va a estar desamparado de la ley democrática española que proteje los derechos de todos y la igualdad de todos».

Rajoy recordó que hoy España es una nación «libre y europea» que tiene una «democracia consolidada y avanzada» y es una de las «grandes potencias del continente y una sociedad de ciudadanos libres e iguales». Recordó lo «mucho» que le ha costado a España llegar hasta donde está y dejó clara su intención de «preservar lo bueno» que los españoles han logrado juntos.

Por ello, insistió, el Gobierno está poniendo en marcha «todos los mecanismos para evitar que nadie pueda arrogarse poderse ilimitados y sin control fuera de la democracia y de la ley».

«Vamos a preservar la democracia en toda España, vamos a defender su principal fundamento que es la soberanía que reside en el conjunto de la nación y con el recurso que les anuncio asumo mi obligación como gobernante y mi convicción como demócrata y como español», afirmó para concluir su declaración institucional.

El Gobierno informa al resto de líderes, el tiempo no es ilimitado

Rajoy admitió una sola pregunta para aclarar que «de momento» ha quedado con el líder del PSOE, Pedro Sánchez y de que se está informando a todos los grupos políticos, al tiempo que justificaba esta decisión de reunirse sólo con el secretario general del PSOE alegando que «el tiempo no es ilimitado», aunque matizó que no tiene «ningún problema» en verse con todo el mundo que «quiera hacerlo».

También insistió en lo que ya había dicho en su declaración y es que hoy ha anunciado la «primera medida» de la que dijo que es «obligada», porque se trata de «recurrir una declaración ante el TC».

«He dicho y reitero que me gustaría no tener que tomar ya ninguna otra decisión, eso significaría que habría vuelto el sentido común a algunas personas que nunca debieron perderlo» y esa sería «la mejor señal de todas las posibles», apostilló. Pero dejó claro que «la Ley es la Ley y cuando se ataca a la Ley todos los instrumentos se pueden utilizar».

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