La dirección nacional del PP ha decidido nombrar una gestora al frente del PP de Madrid tras la dimisión de Esperanza Aguirre, que encabezará la presidenta autonómica, Cristina Cifuentes, y que tendrá como 'número dos' a Juan Carlos Vera, su jefe de campaña en las pasadas elecciones.
La dirección nacional del PP se ha inclinado por la gestora, según han indicado a Efe fuentes populares, tras sopesar si optaba por esa fórmula o por la de convocar una junta directiva regional del PP de Madrid para que este órgano designase a un responsable hasta el congreso ordinario de la formación.
Según ha informado el PP en un comunicado, la composición completa de la gestora se aprobará en el próximo Comité Ejecutivo Nacional del PP.
Este nuevo órgano asumirá la dirección del partido en la Comunidad de Madrid hasta el próximo congreso regional, que como es norma en la formación tendrá lugar después del congreso nacional.
Dirigentes del PP de Madrid y cargos públicos en ciudades y municipios de la región se habían pronunciado hoy en contra de la gestora y a favor de que Cifuentes asumiese lo antes posible el liderazgo del partido tras la dimisión de Aguirre a raíz de la investigación de una supuesta financiación ilegal ligada al caso Púnica.
Diputados de la Asamblea de Madrid y portavoces de ciudades como Móstoles, Alcobendas, Pinto, Getafe y Valdemoro, así como de varios distritos de capital, habían apostado por que Cifuentes se hiciese con las riendas del PP autonómico para evitar una «bicefalia» en partido y comunidad una vez elegida por la Junta Directiva Regional, opción que haría innecesario establecer una gestora en la formación.
La dirección nacional ha optado por una vía intermedia al designar a Cifuentes como máxima responsable de esta gestora.
En cuanto la dimisión de Aguirre, dirigentes del PP nacional y miembros del Gobierno en funciones han esgrimido que se trata de una decisión personal que no puede ser extrapolable a Mariano Rajoy, mientras que el PSOE ha pedido al jefe del Ejecutivo en funciones que emule a la expresidenta madrileña.
El vicesecretario general de Organización del PP, Fernando Martínez Maíllo, ha dicho que la dimisión de Aguirre ha sido una decisión «individual», «subjetiva», «ni siquiera consultada» y no «extrapolable» más allá del PP de Madrid.
En la misma línea, la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, ha señalado que salida de presidenta del PP madrileño es una decisión personal no extrapolable al presidente nacional del partido.
El ministro de Industria en funciones, José Manuel Soria, ha defendido que la dimisión de Aguirre no condiciona la agenda de Rajoy, y el titular de Justicia en funciones, Rafael Catalá, ha apuntado que no merma su legitimidad para seguir liderando el partido y para ser investido de nuevo presidente del Gobierno de España si obtiene los apoyos suficientes.
La propia Aguirre ha rehusado hoy plantear más dimisiones en el partido tras su renuncia: «No estoy para juzgar a nadie y mucho menos para aconsejar a nadie; no aconsejo».
En concreto, preguntada sobre el presidente del Gobierno en funciones, ha negado querer enseñarle el camino con su renuncia.
«De ninguna de las maneras, bastante tengo yo con enseñarme el camino a mí misma», ha agregado.
Quien sí ha invitado a Rajoy a imitar a Aguirre ha sido el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, quien le ha instado a dimitir e irse «por la misma puerta» de la ya expresidenta del PP de Madrid.
Según Hernando, Rajoy debería haber dejado su puesto «hace mucho tiempo» tras los mensajes de ánimo que mandó al extesorero del PP Luis Bárcenas.